El alojamiento está muy bien situado, justo en el centro del pueblo, en plena plaza. Las habitaciones son amplias, cómodas y están muy limpias, al igual que los baños. El servicio es excelente, con un anfitrión muy atento y amable. El desayuno incluido es variado y abundante. Además, la conexión wifi funciona muy bien.

Aunque en general todo fue excelente, sería aún mejor si hubiera un gimnasio en el hotel.

La Cabaña en Canfranc ofrece un encanto rústico y tranquilo. La habitación es acogedora y la calefacción es excelente. El desayuno es exquisito, con tostadas, galletas caseras y opciones deliciosas para elegir. El personal es amable y servicial. La ubicación es conveniente para visitar las estaciones de esquí.

Nada, todo fue perfecto.

Casa rural con encanto, desayuno superó expectativas. Habitación agradable, temperatura estupenda. Aparcamiento fácil, cerca de estaciones. Descanso bueno, opción de cenar. Ambiente cálido, atención amable. Recomendable. ¡Volvería sin duda!

Mi pareja y yo nos alojamos en La Cabaña durante nuestro viaje de esquí a Astún-Candanchú. La atención fue increíblemente buena y el dueño nos hizo sentir como en casa. La habitación era amplia y limpísima, con todas las comodidades necesarias. Destacaría la calefacción, que mantenía la habitación muy calentita. El desayuno era genial, abundante y delicioso, con una gran variedad de opciones. nos encantó la ubicación, a menos de 15 minutos de las estaciones de esquí.

Insisto, este lugar es super recomendado.

Excelente ubicación en la zona de esquí de Astún y Candanchú, además cerca de la estación de Canfranc y otros lugares de interés. Habitaciones limpias y acogedoras, con camas cómodas y baños impecables. Buena organización en el servicio de comidas y desayuno variado y abundante. Atención amable y recomendaciones útiles por parte del dueño. Estancia segura y tranquila, con medidas de higiene rigurosas. ¡Volveremos!

La casa rural La Cabaña es un lugar ideal para hospedarse en medio de un paraíso natural. El dueño, Germán, ofrece una atención personalizada y brinda excelentes recomendaciones sobre rutas de senderismo en la zona. Además, prepara desayunos muy completos y cenas pensadas para montañeros. La casa es acogedora, cálida y está decorada con detalle. Su ubicación en la parte antigua del municipio, cerca del río, le brinda un ambiente encantador. También es destacable la presencia de animales como gallinas, ocas y gatos en el entorno, generando una atmósfera tranquila y armoniosa.

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Esta fue nuestra segunda vez en La Cabaña y sin duda superó nuestra primera experiencia. Destacamos la amabilidad de Germán, su delicioso desayuno y sus recomendaciones sobre qué hacer en la zona. El alojamiento estaba impecable, muy limpio y con todas las medidas de higiene necesarias. Nos sentimos seguros en todo momento. Sin duda, vamos a volver pronto con más ganas. ¡Gracias por todo, Germán!

En mi opinión, el único inconveniente fue que no pude quedarme más tiempo. 😔🕒

La ubicación en pleno centro del pueblo es una ventaja, ya que está en la plaza principal. La habitación era cómoda, con una cama y almohadas confortables. El baño estaba completo, con toallas y artículos de aseo. El servicio fue excelente, con un anfitrión amable y atento, siempre dispuesto a hacer nuestra estancia agradable.

La falta de variedad en las opciones de cena fue .

La ubicación de este hotel es perfecta, está situado en el corazón del pueblo, en una plaza muy bonita. Además, las habitaciones son amplias y acogedoras, y el baño está bien equipado. El desayuno es muy bueno y el servicio es excelente, siempre dispuestos a ayudarnos en todo lo que necesitábamos. disfrutamos de hermosas vistas desde nuestra habitación.

Este fue un inconveniente menor en comparación con todas las cosas positivas que encontramos en este hotel.

Mi estancia en La Cabaña fue realmente maravillosa. La ubicación del alojamiento era perfecta, a solo diez minutos en coche de Candanchú-Astún, lo que facilitó nuestras actividades de esquí. Una de las mejores cosas fue el desayuno, que tenía una excelente relación calidad-precio y era servido en la mesa. También debo destacar la atención increíblemente buena que recibimos por parte del dueño de la casa. Nos enseñó personalmente nuestra habitación, se aseguró de que todo estuviera en orden y hasta nos adelantó el horario del desayuno para que pudiéramos ir temprano a esquiar. La habitación era amplia, estaba muy limpia y contaba con todas las comodidades necesarias. Además, el alojamiento tenía zonas comunes acogedoras donde pudimos relajarnos y disfrutar de un ambiente agradable. En general, estoy muy contento con mi estancia y sin duda recomendaría este hotel.

Encontramos este hotel en pleno centro del pueblo, en la plaza, lo cual facilitó nuestro acceso a todas las atracciones y servicios de esta ciudad. La limpieza del hotel fue impecable, así como las instalaciones y el desayuno ofrecido. El personal fue extremadamente amable y servicial.

Nada, todo bien.

Una estancia increíble en Canfranc! Excelente atención y trato del dueño. Desayuno completo y casero. Cenas de cocina casera y deliciosas. Acogedor y bonito. Plazas de parking reservadas. Ofrecen cuna para bebés. Reformas en marcha para mejorar aún más. Juegos y regalos para niños. Desayuno abundante y variado.

Nada, todo excelente.

Mi estancia en La Cabaña fue totalmente recomendable. La habitación era amplia, confortable y muy limpia, con una cama grande y un colchón muy cómodo. El baño también estaba impecable, con una ducha espaciosa y todo lo necesario. El ambiente de la casa era bonito y acogedor, con un comedor donde podías tomar café en cualquier momento y un rincón para relajarse. La cena fue deliciosa y ofrecían opciones vegetarianas. El trato del personal fue amable y nos permitieron dejar nuestro equipaje antes de la hora de check-in. Además, el wifi funcionaba muy bien. En resumen, tuve una experiencia equilibrada entre profesionalidad y familiaridad. Me sentí como en casa y me hubiera gustado quedarme más tiempo.

Para nosotros fue ideal.

El trato amable y cálido.

Na.

El trato recibido fue estupendo. Germán es muy amable y atento, y nos aconsejaba cada día sobre las rutas que queríamos hacer. Se conoce al dedillo la zona y vale la pena hacerle caso. Además, las cenas caseras estaban muy ricas, y el desayuno genial. La Cabaña es una casa rural toda de madera, súper acogedora y cálida. La ubicación es perfecta, en la plaza, justo en el centro del pueblo.

Nada en absoluto de lo que quejarse.