A nuestra llegada, Cristina estaba esperándonos y nos dio indicaciones sobre el estacionamiento justo debajo de la vivienda en una calle tranquila. La casa, con sus 55 metros cuadrados, era más que suficiente para dos adultos y dos niños, y contaba con todo lo necesario. Se nota el cariño puesto en los detalles, como la calefacción, las vistas y, sobre todo, la limpieza. Cristina, la anfitriona, fue cercana y servicial, proporcionándonos información sobre la zona y sus alrededores. Recomiendo este alojamiento por su calidad, ubicación y el trato amable de sus anfitriones. ¡Hay que visitarlo y disfrutarlo!

Nos encantó La Casita Del Castanar en Bejar. La casa está decorada con mucho gusto y atención a los detalles. Nos sentimos como en casa, gracias a la amabilidad y hospitalidad de Cristina, la dueña. La ubicación es perfecta, rodeada de naturaleza y con vistas excepcionales. Además, la casa está muy bien equipada, con todo lo necesario para una estancia agradable. La limpieza es impecable y disfrutamos de bebidas frías como bienvenida en la nevera. Sin duda, recomendaríamos este alojamiento a nuestros amigos y familiares.

El cuarto de baño es un poco pequeño y la ducha está unida al resto del baño, lo que hace que se moje todo. Las camas hacen ruido al moverse y las almohadas son un poco altas.

Nos ha encantado La Casita Del Castañar. Estuvimos alojados durante unos días y todo fue perfecto. La casa está decorada con muy buen gusto, llena de detalles que hacen la estancia muy agradable. Cristina, la dueña, es encantadora y se desvive por hacer que te sientas como en casa. Todo es de diez, desde la limpieza exquisita hasta las camas súper cómodas. Sin duda, volveremos y la recomendaremos a nuestros amigos y familiares.

Recomiendo este lugar insistentemente.

La casita del Castañar es simplemente perfecta. La ubicación es ideal para disfrutar de la montaña, con pueblos como Candelario cercanos. El alojamiento está hecho con mucho cariño y cuenta con todo lo necesario. Destaco la limpieza impecable y las vistas impresionantes. Cristina, la anfitriona, es cercana y servicial, brindando información útil sobre la zona. Definitivamente recomendaría este lugar por su calidad, ubicación y atención.

No tengo nada negativo que decir.

La ubicación es ideal para disfrutar de la montaña y pasear por los alrededores. Además, hay pueblos cercanos que se pueden visitar a pie, como Candelario. La casa está bien equipada y cuenta con camas cómodas y una decoración atractiva.

El baño es incómodo ya que la ducha no cuenta con mampara ni cortina, lo que provoca que se moje todo el baño al ducharse.