otro gran descanso en Mota Del Cuervo, esta vez en La Posada de Dulcinea. Superó nuestras expectativas nuevamente con amplias habitaciones, excelente temperatura y electrodomésticos modernos. La comunicación con el personal fue genial y disfrutamos de todas las instalaciones, en especial el jacuzzi y el futbolín. Definitivamente, queremos repetir.

temperatura del jacuzzi no adecuada

La recepción y comunicación con la propiedad fue muy buena. Te hacen sentir como en casa. La zona es tranquila y hay cosas para visitar, como los molinos y el castillo de Belmonte. El pueblo tiene vida. La casa es muy bonita, todo nuevo y muy limpio. El desayuno es delicioso, especialmente los bollos típicos de la zona. Recomendamos totalmente.

Me sentí muy relajado, no tengo ninguna razón para quejarme.

La casa es grande, cómoda y bien equipada. Ideal para familias y grupos de amigos. La cocina y la zona de juegos son geniales. La anfitriona es amable y atenta. La ubicación es excelente, en una zona tranquila cerca de tiendas y restaurantes. Hay múltiples actividades interesantes para hacer en la zona.

Nada, todo estuvo bien.

Me alojé en La Posada de Dulcinea durante un fin de semana con un grupo de amigos y fue una experiencia increíble. La casa es espaciosa y está equipada con todo lo que necesitamos. Las habitaciones son amplias y cómodas, y la atención de la dueña fue fenomenal. Tuvimos desayuno todos los días y hasta nos trajeron deliciosos bollos frescos. Además, disfrutamos del futbolín, la cocina equipada en distintas plantas y la amplia zona de comedor. Las habitaciones y zonas exteriores cuentan con pantallas de calidad y la Smart TV en la planta de arriba fue genial. El jacuzzi fue una maravilla y los baños estaban impecables. La casa estaba perfectamente acondicionada con aire acondicionado y calefacción, lo cual nos permitió disfrutar de una temperatura agradable a pesar del calor exterior. También agradecimos la nevera de bar adicional y los electrodomésticos modernos. La insonorización de las habitaciones fue excelente, permitiéndonos disfrutar de música sin molestar a nadie. El pago por transferencia bancaria también fue muy conveniente. En resumen, fue un lugar apetecible por las fotos pero superó nuestras expectativas en la realidad. Recomiendo La Posada de Dulcinea sin dudar.