El entorno de este hotel es simplemente maravilloso. Rodeado de naturaleza y a pocos kilómetros del centro, ofrece paz y tranquilidad. Además, las habitaciones son espaciosas y limpias, con decoración de buen gusto. La cama es muy cómoda y el servicio prestado por los dueños es amable y atento. se destaca la variedad de comodidades y facilidades que ofrece este lugar.

La única desventaja es la cercanía a un cementerio, pero esto puede ser un tema personal y no afecta la calidad del hotel.

El entorno rural encantador. Atención y hospitalidad de la propietaria. Limpieza impecable y comodidades excelentes. Habitación espectacular y espaciosa. Exterior precioso y lleno de naturaleza. Cerca de Santiago de Compostela. Decoración práctica y con buen gusto.

Todo bien.

La tranquilidad y paz del entorno, rodeado de naturaleza. La construcción nueva con una decoración práctica y de buen gusto. La amabilidad y buenos consejos recibidos por parte del personal. Las habitaciones perfectas y cómodas, con camas muy confortables.

Nada, todo excelente.

Hemos estado alojados en un lugar encantador en Santiago de Compostela. La casa era muy bonita y acogedora, con todas las comodidades que necesitábamos. La habitación estaba impecable y no podríamos haber pedido una cama más cómoda. La atención de la dueña, Carla, fue excepcional, siempre amable y dispuesta a ayudarnos. Disfrutamos mucho de la tranquilidad del entorno rural y nos sentimos como en casa. Sin duda recomendaría Landras de Compostela a cualquiera que visite esta ciudad.

Me encantaron los campos verdes y la serenidad del entorno. Perfecto para relajarse y desconectar. Además, a tan solo unos minutos en coche, se llega al centro de la ciudad. Las habitaciones eran cómodas y ofrecían todas las comodidades, incluido aire acondicionado. Todo estaba limpio y bien decorado.

Por otro lado, no me agradó tener que compartir las áreas comunes con otras personas ruidosas e irrespetuosas. La televisión de la habitación también tenía pocos canales.

La ubicación es súper tranquila, rodeada de naturaleza, perfecta para desconectar. Las habitaciones son cómodas con todas las comodidades, incluido aire acondicionado. Todo está muy limpio y cómodo. La persona que nos recibió fue súper amable. ¡Para repetir, sin duda!

Desde el primer momento nos sentimos como en casa. La habitación estaba impoluta y la bañera con hidromasaje fue un gran acierto. Totalmente recomendable.

Me sentí como si estuviera en casa, no tengo ninguna queja en absoluto.