Decidimos visitar el poblado Ibero-romano de Sant Josep y elegimos el Mar de Fulles por su ubicación ideal. Sin embargo, nos sorprendió gratamente la calidad de los productos de la huerta orgánica del hotel, a solo unos metros del restaurante. Disfrutamos especialmente de las frutas y verduras frescas de temporada, que realzaron nuestra experiencia gastronómica.

Problemas de agua y ruidos inesperados durante nuestra estancia. El aire acondicionado no funcionaba, la habitación estaba calurosa y nos quedamos sin agua corriente por una noche.

Mi experiencia en Mar De Fulles fue gratificante. A pesar de algunos inconvenientes, como el desayuno único y la falta de alternativas, disfruté de habitaciones hermosas y relajantes. La zona de la piscina era impecable, ofreciendo un ambiente tranquilo entre las montañas. El entorno era impresionante, y la comida deliciosa añadió un toque especial a mi estadía. Me encantaría regresar para una escapada tranquila. ¡Recomendado!

La comida del restaurante, sorprendentemente deliciosa y con ingredientes frescos. La piscina con vistas es impresionante. Las actividades al aire libre son divertidas y relajantes.

Viví la emoción de compartir "intimidad" con un retiro de 40 personas. ¡Qué privilegio!

Mi director eligió Mar de Fulles para mi viaje de negocios. Durante mi estancia, disfruté especialmente de la cena, donde pude apreciar el cuidado y la calidad en la elaboración de cada plato con productos frescos y sabrosos. Además, el entorno natural del hotel es ideal para desconectar, con senderos que se adentran en los alrededores y permiten disfrutar de la tranquilidad. En cuanto a los aspectos negativos, lamenté la falta de comunicación en el proceso de reserva, ya que no se informó sobre la necesidad de transitar un camino estrecho y peligroso para llegar al hotel. En resumen, Mar de Fulles ofrece un entorno hermoso y oportunidades para desconectar en la naturaleza, pero es importante que mejoren aspectos como la comunicación con los clientes, el mantenimiento de las instalaciones y la atención al cliente para garantizar una estancia satisfactoria.

Las habitaciones, súper cómodas y bonitas, rodeadas de montañas - la zona de la piscina es relajante, limpia y perfecta para desconectar. Se agradece poder coger agua gratis en la recepción. Aunque la comida es de alta calidad y el sitio es un pelín caro, estaría bien si tuvieran opciones más sencillas para quienes no comen carne o tienen alergias alimentarias, sin embargo, ¡en general una maravilla! 🌟.

Obtuve una excelente relación calidad-precio durante mi estadía en Mar de Fulles. La habitación era muy acogedora y cómoda, y el entorno natural en el que se encuentra el hotel es realmente encantador. Además, el personal, especialmente la joven morena de recepción, fue muy atento y profesional. disfruté mucho de la piscina y las camas eran muy cómodas.

El desayuno podría mejorar con la inclusión de zumo de naranja.

La ubicación es simplemente espectacular, con unas vistas impresionantes de las montañas. El ambiente zen y la decoración del lugar son muy acogedores. Las habitaciones son amplias y las camas son súper cómodas, lo que nos garantizó un buen descanso.

Me encantó la ubicación en plena sierra espadan y la tranquilidad del lugar. Las instalaciones eran muy buenas, con una amplia habitación luminosa y una piscina integrada en el entorno. La cama era genial y aseguraba un descanso perfecto. Todo estaba acorde a la propuesta de autoproducción y respeto por el medio ambiente. El desayuno era mediterráneo y saludable, con un café delicioso y unas vistas impresionantes al castillo de Castro. Durante la noche, podíamos observar águilas en el cielo y un cielo lleno de estrellas. El personal fue muy amable y atento.

No hay nada malo que decir ⭐️

Elegí este hotel para asistir a una muestra de productos y me sorprendió la tranquilidad del entorno natural. El restaurante ofrecía platos deliciosos y el personal fue amable. Además, la habitación estaba impecable y contaba con ventanas panorámicas. El aparcamiento gratuito fue una comodidad añadida durante mi estancia.

Eché de menos un centro de negocios para mis reuniones de trabajo. Aunque disfruté de la estancia, hubiera sido útil contar con un espacio adecuado para mis necesidades empresariales.

No quedé satisfecho con la falta de mantenimiento de las instalaciones. Había hierba sin cortar, malas hierbas y arbustos en mal estado. Además, las habitaciones presentaban grietas en las paredes y había telarañas, lo que indicaba una falta de limpieza a fondo. También me la escasa cantidad de comida en la cena en relación con el alto precio que cobraban.

La estancia en este alojamiento fue fantástica. Está ubicado en un entorno natural precioso y encantador, perfecto para desconectar. Nos impresionó la oferta gastronómica, con ingredientes de alta calidad y una cena del sábado noche donde se cocinaba en directo. Cada sabor, textura y olor estaba cuidado al detalle. Además, el equipo humano nos atendió de manera perfecta, siempre atentas y dispuestas a ayudar en todo momento. Nos sentimos como en casa gracias a su hospitalidad. disfrutamos de la tranquilidad y la piscina, fue realmente relajante.

Nada, todo fue perfecto 😊