Me encantó mi fin de semana en este lugar. La señora que nos atendió fue muy amable y siempre estuvo atenta a nuestras necesidades. Todo estaba muy limpio y ordenado, y nos ofrecieron un desayuno cortesía con tostadas, magdalenas, mermelada, mantequilla y café con leche. Otra ventaja es que está en una ubicación perfecta para los caminantes, con muchos senderos en la zona y cerca de los montes de Anaga. Además, había pocos huéspedes, por lo que pudimos disfrutar de la tranquilidad y tener la sensación de tener el lugar para nosotros mismos. También disfrutamos de una terraza con vistas increíbles al mar.

El único aspecto negativo fue que el desayuno podría haber sido más completo, pero entiendo que esto no afecta la calidad del alojamiento. Además, el estacionamiento puede ser un poco complicado, pero esto es normal en los pueblos del norte de Tenerife.

Destacamos la amabilidad y atención de la señora que nos atendió, Pina. El hotel se encontraba siempre limpio y ordenado. Disfrutamos de un desayuno cortesía del hotel, con tostadas, magdalenas, mermelada, mantequilla y café con leche, todo ello en un autoservicio en la cocina y comedor del hotel. Las instalaciones eran formidables y nos sentimos como en casa. La ubicación del hotel era perfecta para los amantes del senderismo, ya que se encuentra cerca de numerosos senderos de las montañas de Anaga, ofreciendo un lugar tranquilo y alejado del bullicio para descansar después de las actividades de montaña. Además, encontramos un supermercado a solo 600 metros del hotel.

Nada que me haya disgustado.

nuestra estancia en punta del hidalgo superó nuestras expectativas. el alojamiento en las gaviotas fue tranquilo y acogedor, con habitaciones cómodas y una anfitriona amable que nos ofreció un desayuno completo. la ubicación cerca de los senderos de anaga y los servicios cercanos fueron muy convenientes.

Momento del check-in limitado.

Mejor relación calidad/precio | Hermosas vistas desde la terraza | Espacios comunitarios tranquilos.

Habitaciones en estado lamentable | Falta de comodidad en las camas | Instalaciones antiguas.

El alojamiento está situado en un lugar privilegiado, en lo alto de la punta de Hidalgo y cerca de los senderos de Anaga. Hay bares, farmacia y supermercado cerca. La anfitriona es amable y deja todo lo necesario para el desayuno. Las habitaciones son confortables y el ambiente es tranquilo.

Me sentí muy seguro, no me puedo quejar.