Mi estancia en Molino de Saladilla ha sido excepcional. Desde el momento en que llegué, fui recibido con una gran amabilidad por parte de los anfitriones. Me brindaron toda la ayuda necesaria, incluso vinieron a buscarme para evitar que tuviera que caminar. La habitación en la que me alojé era espaciosa, luminosa y muy cómoda, con un baño maravilloso. Además, el alojamiento cuenta con una zona exterior fantástica, con una terraza, asientos y una piscina con tumbonas, perfecta para relajarse. También me encantó la posibilidad de poder alojarme con mi mascota. Además, el lugar está rodeado de naturaleza y tiene un picadero de caballos, lo que le da un encanto especial. También disfruté de un rico y variado desayuno. En resumen, Molino de Saladilla ha sido uno de los mejores lugares en los que me he alojado y sin duda lo recomendaría a otros viajeros.

El único inconveniente que podría mencionar es el acceso al hotel, ya que el camino de tierra desde la carretera está en malas condiciones. Sin embargo, cabe destacar que es un trayecto corto.

Nos encantó la paz que se respiraba en todo el recinto y el ambiente acogedor tanto para parejas como para familias. Miranda, la encargada, tiene un trato cercano y atento con los huéspedes, haciéndonos sentir como en casa. Los anfitriones son excepcionalmente amables y nos ayudaron en todo momento con nuestras dudas, incluso nos vinieron a buscar para ahorrarnos el traslado a pie. La habitación era amplia, luminosa y contaba con un baño maravilloso. El lugar es encantador, extremadamente limpio y con una zona exterior excelente, incluyendo terraza, asientos y piscina con tumbonas. Además, se permite alojarse con mascotas y tienen un picadero de caballos anexo al edificio.

Me sentí como en casa allí, no tengo ninguna queja en absoluto.

La amabilidad y atención del personal es excepcional. Proporcionan información y asistencia para llegar al lugar. La habitación es amplia y luminosa, con un baño maravilloso. El alojamiento tiene encanto y está muy limpio. Hay una zona exterior con terraza, asientos y piscina. Además, se permite alojarse con mascotas.

El alojamiento es estupendo, con habitaciones bonitas y cómodas. Las zonas comunes están cuidadas y el personal es encantador. Además, la ubicación es perfecta, muy cerca del centro y con la tranquilidad de estar en el campo.

Nada que decir.

El alojamiento en Molino de Saladilla fue excelente. Las zonas comunes estaban hermosas y bien cuidadas, y la habitación era cómoda, amplia y tenía una zona exterior para disfrutar. Fue muy amable por parte del personal dejarnos una botella de vino de obsequio. La ubicación era perfecta, justo al lado del centro del pueblo pero con la tranquilidad de estar en el campo. El desayuno también fue muy recomendable, con una gran variedad. Sin duda, volvería a repetir esta experiencia.

Nada, todo fue perfecto. 👌