Habitaciones amplias con cama de gran tamaño. Cuartos de baño cómodos y equipados. Ambiente tranquilo en los patios. Buena cena y camarero agradable. Silencio absoluto.

El lugar está muy bien ubicado, en el centro de la ciudad. Además, cuenta con un hermoso jardín donde puedes relajarte y disfrutar de la tranquilidad. Las habitaciones están bien mantenidas y reformadas, con detalles que conservan la esencia monegasca.

Las camas son un poco duras y el acceso a las habitaciones es incómodo debido a las puertas con llave.

El Monasterio de San Francisco en Palma del Río es un lugar maravilloso para alojarse. La arquitectura típicamente andaluza del edificio es encantadora y los jardines y la piscina son un lugar perfecto para relajarse. Aunque podrían mejorar la limpieza de los jardines, en general el sitio es acogedor y tranquilo. El personal es amable y el desayuno es fantástico. Además, la parada de autobús que va a Córdoba está justo enfrente, lo cual es muy conveniente. Sin duda, volvería a alojarme aquí en el futuro.

No pude encontrar ningún fallo 👍

Las habitaciones son amplias y cómodas, con todo lo necesario. El desayuno es correcto y el personal es amable. Hay una piscina exterior para refrescar en verano. La ubicación histórica y tranquila permite aislarse del ruido diario. 😊

Me encantó el ambiente histórico y tranquilo del edificio. Las habitaciones eran espaciosas y con estilo. La piscina y el jardín eran agradables para relajarse. El personal fue muy atento. La comida en el restaurante también fue excelente.

La paz y tranquilidad del lugar, la exquisita comida y el excelente trato del personal. Las amplias habitaciones y su limpieza impecable. Además, este hotel se encuentra en un jardín tranquilo y en una ubicación conveniente en el centro de la ciudad.

Todo está bien.

la amabilidad del personal y la belleza del edificio restaurado con respeto al original del monasterio crearon una experiencia relajante en Palma del Río. El desayuno fantástico y la habitación amplia con camas cómodas hicieron que mi estancia fuera memorable. Todo estaba cuidadosamente diseñado para descansar y serenarse.

falta de información sobre la política de mascotas y el trato poco acogedor en recepción dejaron una impresión negativa.

El monasterio está ubicado en el centro de la ciudad, lo cual es muy conveniente. Además, cuenta con unos jardines preciosos donde se puede disfrutar de momentos de tranquilidad. La habitación en la que me alojé era amplia y limpia, con una cama muy cómoda. El baño también era grande y estaba en perfectas condiciones. El servicio fue amable y atento, haciendo que mi estancia fuera muy agradable.

Aunque en general mi experiencia fue positiva, el desayuno era un poco caro para ser de tres estrellas.

Me encantó alojarme en este hotel. El edificio es tan histórico y tiene un precioso jardín con piscina. La habitación era muy amplia y tenía una cama grande y cómoda. El personal siempre estuvo atento y amable. Definitivamente lo recomendaría, uno de los mejores hoteles en los que he estado.

Recomendaría este hotel a otros.

Una estancia encantadora! Habitación amplia y cómoda, baño con bañera y ducha, jardines hermosos y personal amable. La ubicación y tranquilidad del monasterio son excelentes y el interior te transporta al siglo XV. Ana, la recepcionista, fue muy profesional y atenta. ¡Gracias!

Nada podría haber sido mejor.

El lugar es realmente encantador, ubicado en un jardín que ofrece paz y tranquilidad absoluta. Las habitaciones son espaciosas y cuentan con todas las comodidades necesarias. El personal es amable y servicial, siempre dispuesto a ayudar. Además, el desayuno es variado y delicioso, con opciones para todos los gustos. Además, el hotel se encuentra en el centro de la ciudad, lo que facilita el acceso a diferentes atracciones turísticas.

El restaurante del hotel deja un poco que desear en términos de calidad y variedad de opciones.

Me alojé en el impresionante Monasterio de San Francisco y fue una experiencia inolvidable. Las vistas desde la habitación eran increíbles y el ambiente tranquilo del lugar era simplemente maravilloso. El personal, en especial Ana, la recepcionista, fue extremadamente amable y atento. Definitivamente volvería sin dudarlo. Además, el Sendero de los Ángeles en el Parque Natural de Hornachuelos, que está a solo 20 minutos en coche, es una visita obligada. Fue una ruta hermosa y agradable que recomendaría a todos los que visiten la zona.

Imposible encontrar algo negativo 😊

Mi estancia en Monasterio de San Francisco fue maravillosa. El ambiente tranquilo y la amabilidad del personal hicieron que me sintiera como en casa. El hotel está cuidadosamente rehabilitado y diseñado, lo que lo hace ideal para descansar y relajarse. Además, el edificio histórico con su jardín y piscina añade un encanto especial a la experiencia. Quiero destacar especialmente a Ana, la recepcionista, quien fue muy amable y atenta durante toda mi estancia. Gracias a ella, no me faltó ningún detalle y me hizo sentir bienvenida desde el primer momento. ¡Eres ejemplar!

No dudaría en recomendar este hotel.

Nos alojamos en un hotel con una ubicación excepcional, en pleno centro de la ciudad. Además, está rodeado de hermosos jardines que brindan un entorno tranquilo y agradable. La habitación en la que nos hospedamos era espaciosa y cómoda, con un baño grande y bien equipado. El servicio del personal fue atento y amable, asegurándose de que tuviéramos todo lo que necesitábamos. El desayuno buffet ofrecía una variedad satisfactoria de opciones para comenzar el día. También disfrutamos de una vista impresionante desde nuestra habitación.

El único inconveniente fue la falta de personal en el servicio del desayuno, lo que hizo que algunas cosas no estuvieran disponibles o tardaran en reponerse.

La experiencia de alojarme en un antiguo monasterio fue algo realmente especial. El lugar se encuentra en un hermoso jardín, lo cual le da un ambiente tranquilo y relajante. Además, está ubicado en el corazón del valle, lo que permite disfrutar de impresionantes paisajes. La habitación que me asignaron era amplia y contaba con un baño muy coqueto. Me encantó despertar y disfrutar de un delicioso desayuno en el bar del hotel.

El restaurante no cumplió con mis expectativas en cuanto a la calidad de la comida. Aunque el servicio y la atención del personal fueron impecables, la comida no estuvo a la altura.