Nuestra estancia en este hermoso lugar fue simplemente excepcional. Oar Cottage nos brindó la tranquilidad y el silencio que tanto buscábamos, además de un ambiente acogedor y encantador. Carmen y Manuel, los propietarios, fueron amables y hospitalarios, y nos hicieron sentir como en casa desde el primer momento. El caserío está decorado con exquisitez y cada detalle ha sido cuidado con esmero. Las habitaciones son amplias y cómodas, y las vistas al paisaje circundante son impresionantes. El desayuno casero fue delicioso y el personal siempre estuvo dispuesto a ayudar. En resumen, nuestra experiencia en Oar Cottage fue absolutamente recomendable y nos hizo sentir como en un lugar especial.

No ☹️. El lugar fue realmente perfecto y no encontramos ningún aspecto negativo en nuestra estancia.

nuestro segundo alojamiento en Durango superó nuestras expectativas. El encanto de cada rincón del hotel nos cautivó, al igual que las maravillosas vistas desde nuestra habitación acogedora. El desayuno fue impecable y equilibrado, y el trato del personal fue excepcional. Sin duda, volveremos a disfrutar de esta experiencia inolvidable.

Falta bañera en la habitación.

Nos hospedamos en un precioso caserío reformado llamado Oar Cottage. La atención de Carmen fue excepcional, nos hizo sentir como en casa. Las habitaciones eran tranquilas y cálidas, con hermosas vistas al paisaje. El desayuno casero fue el punto culminante de nuestro fin de semana, ¡delicioso! La ubicación era muy accesible, con parking gratuito. ¡Ideal para desconectar y relajarse!

Todo estuvo bien 👍

Un lugar de ensueño. Precioso caserío medieval en medio de la naturaleza, restaurado y decorado con un gusto exquisito, te permite desconectar desde el primer momento y descansar en sus maravillosas habitaciones. El desayuno es delicioso y destacar la calidez y el trato de los propietarios, Carmen y Manu, que te hacen sentir como en casa desde el primer momento, así como del resto del equipo. Oar Cottage es una parada obligatoria que debería hacer todo viajero!

Recomiendo este hotel, es total.

la mejor estancia en Durango hasta ahora. Oar Cottage superó todas nuestras expectativas. La casa estaba impecablemente decorada, con atención al detalle y una auténtica calidez en cada rincón. El desayuno fue de alta calidad y disfrutamos cada bocado. La ubicación era perfecta para desconectar y relajarse. Sin duda volveremos, ¡gracias!

El calor nocturno fue incómodo.

Gentes que buscan una escapada tranquila y con encanto, esta casita es perfecta. Decoración rústica y moderna al mismo tiempo, con todas las comodidades necesarias. Las habitaciones son amplias, limpias y confortables. El desayuno casero es excelente, con una variedad de panes, embutidos y bebidas. Además, la ubicación es privilegiada, con vistas al monte y en un bonito pueblo. El personal es muy amable y atento, hacen que te sientas como en casa. Sin duda, un lugar al que volvería y recomendaría sin dudarlo.

Lo único negativo es que no ofrecen servicio de comidas y cenas. Aunque hay una taberna cercana, no nos gustó la comida ni los precios.

Mi estancia en Oar Cottage fue simplemente maravillosa. El lugar es un sueño hecho realidad, con un caserío medieval bellamente restaurado en medio de la naturaleza. Desde el momento en que llegué, pude desconectar y descansar en sus habitaciones increíbles. El desayuno era delicioso, con una gran variedad de panes, embutidos y bebidas caseras. No puedo dejar de mencionar la calidez y amabilidad de Carmen y Manuel, quienes me hicieron sentir como en casa desde el primer momento. El personal en general fue increíblemente amable y atento. Oar Cottage es sin duda un lugar que recomendaría a todos los viajeros. ¡Una parada obligatoria!

Aunque todo fue perfecto, mencionaría brevemente que el sonido del televisor no era de mi agrado. Soy un poco exigente con la tecnología.

La estancia en Oar Cottage fue simplemente perfecta. Desde el momento de nuestra llegada, nos recibieron con mucha atención y amabilidad. Nos alojamos en una suite y quedamos impresionados por la cantidad de detalles bien cuidados que tenía el caserío. La cama era extremadamente cómoda, el baño con ducha y bañera nos encantó, y todos los artículos de aseo estaban disponibles, incluyendo albornoces y chanclas. El jardín de la casa era un lugar tranquilo y relajante para descansar. Y no podemos dejar de mencionar el desayuno, ¡simplemente increíble! La mujer encargada del servicio nos trató de manera inmejorable. Cada mañana despertábamos con el aroma a croissant que nos invitaba a bajar corriendo a desayunar. Sinceramente, después de esta experiencia, cualquier alojamiento que se acerque a Oar Cottage será una gran elección. ¡Enhorabuena por todo, seguid así! Volveremos con seguridad.

Me hubiera encantado quedarme todas las vacaciones en Oar Cottage, pero ya tenía otras reservas. La única pequeña desventaja es que no ofrecen comidas y cenas, salvo por encargo y con platos fríos.

El alojamiento está situado en un hermoso entorno montañoso, rodeado de naturaleza. Las habitaciones son amplias y cómodas, con baños igual de maravillosos. El servicio es impecable y el desayuno muy completo y delicioso. Además, se pueden disfrutar de diversas instalaciones como zonas para relajarse y disfrutar del entorno. se destacan los detalles cuidados al máximo, como la decoración y la música ambiental.

Me hubiera gustado que ofrecieran comidas y cenas a parte del desayuno, para no tener que salir a buscar opciones externas al alojamiento.

La limpieza impecable, las instalaciones del hotel son excelentes con un bello entorno en las montañas, la ubicación en plena naturaleza es perfecta para desconectar, el desayuno es completo y delicioso.

Nada, todo fue maravilloso.

Este hotel es perfecto para aquellos que buscan descansar y desconectar en un entorno natural y hermoso. La habitación ofrece vistas impresionantes y una cama comodísima, además de ser muy tranquila. El desayuno es abundante y el personal es atento y amable. La decoración del hotel crea un ambiente acogedor y agradable. La limpieza es impecable. Además, el hotel cuenta con todas las instalaciones necesarias y el estacionamiento es conveniente. En resumen, este hotel ofrece una experiencia inolvidable en un hermoso entorno natural.

Nada, es perfecto: No hay ningún aspecto negativo que mencionar. Todo en este hotel es perfecto y no hay nada que pueda mejorar.

El caserío reformado con gusto. Techos altos y vistas espectaculares. Ubicación privilegiada cerca de Durango. Desayuno delicioso y completo. Personal amable y atento