Me encantó hospedarme en un edificio del siglo XVIII con todas las comodidades modernas. El restaurante Puerta de la Reina ofrecía comida auténtica con un toque revitalizante. El ambiente de lujo y relajación fue ideal para desconectar.

Me encantó buscar aparcamiento y esperar en la recepción.

Habitación amplia y cómoda. Edificio histórico rehabilitado. Buen restaurante. Personal amable y atento. Servicios excelentes: desayuno, piscina, gimnasio. Zonas comunes acogedoras. Ambiente tranquilo y relajante. Fácil aparcamiento.

Nada que pueda disgustar.

Siempre vuelvo por el buen servicio y confort. Me encanta la variedad de instalaciones como piscinas, masajes y gimnasio. Además, la primera vez me orientaron sobre la moneda local. Volveré para una escapada.

Mi estancia en el Parador De La Granja fue increíble. Desde el momento en que llegué, me impresionó la calidad en todos los aspectos del hotel. El personal fue amable y servicial, y las instalaciones eran simplemente impresionantes. El edificio en sí era majestuoso y me encantó poder admirarlo desde las habitaciones, los patios e incluso el restaurante. El desayuno era delicioso y completo, y el personal se aseguró de que recibiera un excelente servicio. Además, disfruté mucho de la opción de tener diferentes tipos de almohadas para elegir.

Hubo algunos aspectos negativos durante mi estancia. Por la noche, se escuchaban ruidos de las máquinas de calefacción o aire acondicionado en las habitaciones.

Un hotel encantador en un edificio histórico con habitaciones amplias y bonitas. Desayuno estupendo y personal amable. Ubicado cerca del Palacio y jardines.

Limpieza impecable en todo el hotel. Las instalaciones del hotel son impresionantes. El hotel cuenta con estacionamiento disponible. La ubicación en las montañas ofrece unas vistas espectaculares. El desayuno es variado y de calidad. El personal del hotel es amable y servicial.

Tuve una estancia estupenda en Parador de La Granja. El edificio está muy bien conservado y modernizado, conserva su esencia y al mismo tiempo plantea una muy buena decoración moderna. Las habitaciones son grandes y confortables, y pude disfrutar de la tranquilidad a pesar del tamaño del alojamiento. Además, las instalaciones del Parador son excelentes, con una librería, cafetería, salón comedor, terraza, piscina exterior e interior, pádel, entre otras comodidades. También destacaría la ubicación del Parador, que es excelente. El edificio anexo de servicios deportivos también es espectacular.

De verdad no hay nada que no me haya gustado 😊

Disfrutamos de una emocionante jornada en La Faisanera Golf y de la impresionante belleza del Puerto de Navacerrada. El entorno natural nos brindó la oportunidad de disfrutar de la naturaleza y realizar actividades al aire libre, lo que creó recuerdos inolvidables para toda la familia.

Mi mujer dice que sería genial tener actividades supervisadas para niños.

El hotel es precioso. Está muy limpio y tranquilo. El desayuno es variado y de calidad. El personal es amable y atento.

Todo era lo que quería y necesitaba.

El Parador de la Granja ofrece habitaciones confortables y modernas en un edificio histórico del S.XVIII. El personal es amable, profesional y eficiente. Los desayunos son fabulosos y muy surtidos de todo tipo de productos. Merece la pena hacer una estancia en el parador y disfrutar de los jardines de La Granja de San Ildefonso y de su increíble patrimonio cultural y natural.

Me sentí realmente como en casa, no tengo ninguna queja.

La comida es exquisita, especialmente el cochinillo asado. Durante mi estancia, disfruté de una comida que estaba para chuparse los dedos. El cochinillo era tan tierno y sabroso que se deshacía en la boca, ¡no podría haber sido mejor si lo hubiera cocinado la abuela!

Pequeños detalles en la habitación.

El edificio es maravilloso y ha sido perfectamente rehabilitado. Aquí se respira tranquilidad y paz. Las habitaciones son amplias y están muy bien insonorizadas, lo cual garantiza un descanso óptimo. Además, el baño es estupendo y cuenta con todas las comodidades necesarias. Las instalaciones del hotel son excelentes, con servicios como el desayuno, el patio interior, el salón de lectura, la piscina y el gimnasio. Todo está impecablemente limpio y el personal es muy atento. La ubicación es privilegiada, ya que se encuentra en un lugar envidiable, rodeado de montañas.

Me gustó todo.

La limpieza impecable, tanto en las habitaciones como en las áreas comunes del hotel. Las instalaciones son amplias y espectaculares, especialmente el patio interior que es una verdadera joya. El desayuno es increíble, con una gran variedad de opciones deliciosas. Además, el personal del hotel es extremadamente amable y servicial. La ubicación en las montañas es simplemente espectacular, ofreciendo vistas impresionantes y un ambiente tranquilo y relajante.

No se puede culpar a la propiedad de ninguna manera.

Mi elección de alojamiento para asistir a un sínodo fue ideal gracias a las 16 salas de reuniones con capacidad para más de 600 personas. El personal demostró amabilidad y eficiencia. Sin embargo, eché de menos un servicio de restauración disponible por la noche. A pesar de eso, mi estancia fue cómoda y tranquila, permitiéndome descansar y prepararme para mis compromisos laborales.

Me encantó mi estancia en este hotel durante el Año Nuevo. Los mejores aspectos fueron la ubicación y los servicios adicionales que ofrecían. Está perfectamente ubicado cerca de los jardines históricos y de las montañas de la zona, lo cual fue ideal para disfrutar de paseos y actividades al aire libre. Además, el desayuno era muy variado y de alta calidad, con una gran selección de productos frescos. También disfruté de las instalaciones de ocio, como la piscina y el gimnasio, que eran una ventaja adicional.

Hubo algunas cosas que no me gustaron tanto. Por ejemplo, no ofrecían la opción de tomar un café y unas galletas antes de la hora de apertura del comedor, lo cual habría sido útil para las excursiones tempranas.