El lugar está en una ubicación increíble, justo en el centro de los bares de pintxos del casco antiguo, pero también tranquilo por la noche y madrugadas. La habitación era cómoda y limpia, despertamos con el sonido de pájaros y el olor a pan y pasteles frescos, sin ruidos de tráfico o trabajadores. Juan, nuestro anfitrión, fue muy amable y nos proporcionó una guía maravillosa de su ciudad, así como ayuda para orientarnos en la cultura y el idioma vasco. 🌟 ¡Excelente estadía!

En Hotel Triplets, la diversión en familia estuvo asegurada con las actividades diarias organizadas para los niños, como manualidades y juegos en grupo. ¡Los pequeños se lo pasaron en grande! Además, la ubicación céntrica facilitó nuestro recorrido por la ciudad.

Mi mujer dice que sería útil contar con menú infantil en el restaurante.

Obtuve una excelente relación calidad-precio en la habitación acogedora y cálida. La ubicación en pleno casco antiguo fue perfecta, y el personal fue atento y amable durante toda mi estadía en el alojamiento.

La comida del desayuno podría mejorar con más variedad en la oferta.

Una particularidad encantadora de este lugar es la amplitud de la cama en mi habitación. ¡Era tan gigante que me sentí como un hobbit en una cama de gigante! Dormí como un tronco, era como tener mi propio oasis de descanso en medio del bullicio de la ciudad.

Ruido ocasional del minibar.

Habitación pequeña con ventana a pared de cemento, pero limpia y segura. Personal amable y servicial. Ubicación ideal en el casco antiguo, cerca de bares de pintxos. Despertar con olor a pan recién horneado ¡sin ruidos molestos! El dueño, Juan, nos brindó valiosa ayuda para entender la cultura vasca. Muy contenta a pesar de las risas con mi hija ¡que llevaron a malentendidos!