El servicio excelente, la dueña muy atenta. Habitación con aire acondicionado, baño compartido pero muy limpio y bien equipado. El pueblo precioso, hay que disfrutarlo al máximo. 🌟

Atención amable y cordial. Habitación limpia. Camas cómodas. Buena ubicación cerca de comercios y restaurantes

Nada negativo.

Lo mejor de este hotel fue la limpieza y las instalaciones. La habitación estaba impecable y el baño era amplio y tenía todos los detalles necesarios. Además, el personal fue muy amable y servicial durante toda mi estancia. Otra ventaja fue la ubicación del hotel, que estaba cerca del centro de la ciudad y de la plaza principal. También había parking disponible y el desayuno en el bar del hotel fue excelente.

Todo fue perfecto.

Me encantó la habitación en la que me alojé durante mis vacaciones. Era pequeña pero tenía todo lo necesario y estaba bien amueblada. Las camas eran muy cómodas y todo estaba muy limpio. Además, el baño estaba en buenas condiciones y también estaba limpio. La ubicación del hotel era estupenda, ya que estaba cerca de la plaza del pueblo. Esto hizo que fuera fácil moverme por la zona y disfrutar de todo lo que el pueblo tenía para ofrecer.

Hubo algunas cosas que no me gustaron tanto. Por un lado, se escuchaba mucho ruido proveniente de las habitaciones vecinas y de las tuberías.

Habitación amplia y cómoda, vistas magníficas, personal amable, habitación nueva, atención al detalle.

Todo fue maravilloso.

¡Una estancia fabulosa en Pensión Portomiño! La habitación era acogedora, con una tele y una luz individual. Además, el baño compartido era amplio y la ducha era perfecta. Nos proporcionaron toallas, lo cual fue genial. También me encantó la ubicación, a solo unos pasos del centro de la hermosa ciudad. ¡Definitivamente recomendaré este hotel!

La ubicación de la pensión era ideal, ya que estaba cerca de la plaza principal y del centro de la ciudad. Además, había varias cafeterías en las cercanías, lo cual era muy conveniente. me gustó que la habitación privada era cómoda y estaba limpia, lo que me permitió descansar después de un largo día de caminata.

El único punto negativo fue que había algo de ruido en la habitación debido a los huéspedes que se alojaban en habitaciones contiguas.

La habitación era amplia y estaba limpia, lo que permitió que pudiera descansar bien durante mi estadía. Además, pude disfrutar de las espectaculares vistas del Miño desde el hotel, lo cual fue un verdadero placer. También me encantó la tranquilidad del pueblo y su belleza.

La recepción se realiza en el bar, lo cual implicó horarios limitados. Además, el hotel está ubicado en una cuesta, lo que puede resultar incómodo para aquellos que estén haciendo el Camino de Santiago.

El personal amable. Habitación amplia y cómoda con excelentes vistas. El hotel muy limpio y bien cuidado. Ubicación cerca del centro de la ciudad.

Imposible encontrar algo.

Mi pareja y yo tuvimos una experiencia muy agradable en nuestra estadía en Pension Portomino. Lo que más nos gustó fue la amabilidad del personal, quienes se tomaron el tiempo de asegurarse de que estuviéramos cómodos y satisfechos durante nuestra estancia. Además, las habitaciones eran amplias y limpias, lo que nos dio la tranquilidad que necesitábamos después de un largo día de caminata. También nos sorprendió gratamente que a los peregrinos cansados se les ofreciera un plato de fruta de cortesía, un pequeño gesto que hizo una gran diferencia para nosotros. Otro aspecto destacado fue la sala de clientes, donde pudimos disfrutar de infusiones gratuitas y tener acceso a una nevera. Y por supuesto, el precio fue muy razonable considerando todas estas comodidades.

Mi estancia en Pensión Portomiño fue muy agradable. La habitación estaba totalmente equipada con dos camas muy cómodas y tenía aire acondicionado y televisión. El baño compartido era limpio y tenía todas las comodidades necesarias, incluyendo toallas, gel y un secador de pelo. Además, el personal fue amable y servicial durante mi estancia.

La habitación era cómoda y limpia, con un baño compartido grande. La recepcionista fue muy amable y atenta, incluso nos llevó mantas a la habitación cuando se las pedimos. Además, había una cafetería en el hotel donde se podía tomar algo de forma tranquila.

El principal problema fue el ruido. Las paredes eran muy delgadas y se escuchaba todo lo que ocurría fuera de la habitación.