La habitación de madera era preciosa y limpia. Desayuno completo y delicioso. Pueblo tranquilo para desconectar. Personal atento y amable.

nuestra estancia en la Posada de Fidel en Puentenansa fue fantástica. El trato amable y atento de los propietarios nos hizo sentir como en casa. Nos brindaron detalles especiales y nos dieron recomendaciones interesantes sobre la zona. Sin duda, superó nuestras expectativas.

El desayuno fue un poco limitado. Faltó variedad de opciones, especialmente algo salado.

Este hotel es una maravilla en las montañas de Cantabria. Me encantó la atención al detalle, desde la hermosa decoración de madera hasta el mobiliario de calidad. Las habitaciones con características del siglo XVIII son muy atractivas. Además, el desayuno era excelente, con zumo de naranja natural, café y una gran variedad de alimentos.

Todo estaba bien.

Nos encantó la limpieza impecable de este hotel. Estaba todo muy cuidado y la habitación amplia y cómoda. El desayuno nos sorprendió gratamente, con zumo de naranja natural y una buena variedad de opciones. Además, el personal fue muy amable y nos brindó excelentes recomendaciones sobre dónde comer y cenar. apreciamos el abundante estacionamiento disponible en los alrededores del hotel.

Sin problemas.

La Posada de Fidel cumple con creces mis expectativas de un alojamiento sencillo pero limpio y bien situado. El mobiliario es moderno y el baño está cuidado. El desayuno es perfecto y la atención excepcional. Repetiré.

Me sentí muy cómodo, no tengo ninguna razón para quejarme.

Este alojamiento se encuentra en un entorno natural privilegiado, rodeado de montañas. Algunos detalles mencionados en las opiniones incluyen habitaciones limpias y rústicas, así como un desayuno básico pero completo. Además, el alojamiento destaca por su amabilidad y atención al cliente. se menciona un buen wifi y zumo de naranja natural en el desayuno.

Encontrar opciones de cena en los alrededores puede resultar complicado, pero hay pueblos cercanos donde se puede encontrar variedad gastronómica.

Mi estancia en la Posada de Fidel fue muy agradable. Destaco la limpieza tanto de las habitaciones como de las instalaciones en general. El personal fue amable en todo momento y se esforzó por hacerme sentir cómodo y a gusto. El zumo de naranja natural en el desayuno fue delicioso y me encantó que estuvieran pendientes de que todos los huéspedes quedaran satisfechos. Además, la conexión wifi funcionó de maravilla. Sin duda, es un buen lugar para hospedarse si visitas la zona.

El desayuno no era muy variado, faltaban opciones como huevos o croissants. El café era pasable y el único punto positivo del desayuno era el zumo de naranja natural.

Viajábamos con nuestros hijos y en el momento del desayuno nos ofrecieron leche sin lactosa, un buen detalle. El personal fue discreto y eficiente. El hotel ofreció un ambiente muy tranquilo para descansar. Fidel y su esposa fueron encantadores. La cama era cómoda y la ubicación del hotel era buena.

De verdad que lo recomiendo.

Muy limpio, bien situado, mobiliario moderno, baño reformado, desayuno perfecto, atención excepcional.

Nada de nada.