nuestra estadía en Cuenca fue simplemente espectacular. La ubicación privilegiada del hotel, junto a la catedral y con vistas increíbles, nos dejó maravillados. Además, la historia del edificio y la encantadora terraza añadieron un encanto extra a nuestra experiencia.

La habitación no cumplió nuestras expectativas. A pesar de haber hecho la reserva con antelación, sentimos que podrían habernos dado una habitación mejor por el precio que pagamos.

Decidimos hospedarnos en Posada San José durante nuestro viaje a Cuenca. Estuvimos allí durante varios días y fue una experiencia excepcional. La habitación que nos asignaron tenía unas vistas espectaculares a la hoz del Huécar, lo que nos permitió disfrutar de horas de contemplación. Además, nos encantó que admitieran mascotas, ya que pudimos llevar a nuestro perro con nosotros. El personal fue muy amable y nos hizo sentir como en casa. Sin duda, la ubicación, el encanto del edificio y las vistas fueron las mejores características de nuestra estancia en Posada San José.

Insisto, este lugar es super recomendado.

La Posada San José en el centro histórico de Cuenca tiene una ubicación inmejorable para explorar el casco antiguo. La historia y encanto del edificio le dan un toque especial. El señor de recepción fue muy amable, contándome historias y curiosidades del lugar. Aunque la habitación era austera, eso también era parte de su encanto.

El edificio no cuenta con aire acondicionado, lo que puede ser incómodo en verano. El desayuno no era tan bueno, es preferible desayunar en los bares vecinos.

Nos encantó la ubicación en pleno centro del casco antiguo, justo en frente de la catedral y cerca de todas las atracciones principales. También destacamos la limpieza impecable tanto de las habitaciones como de todo el hotel. El personal fue muy amable y atento, y el desayuno delicioso. Además, el hotel ofrecía instalaciones completas y cómodas, y contaba con un fácil acceso al parking.

Nada que no me haya gustado.

La ubicación es increíble, al lado de la catedral y cerca de todas las atracciones principales. Este hotel está en el corazón del centro histórico, en el casco antiguo de la ciudad. El personal del hotel es muy amable y servicial. Además, el hotel cuenta con un restaurante que merece la pena visitar.

No se puede culpar a la propiedad de ninguna manera.

Me encantó la estancia en este encantador alojamiento medieval en el corazón del casco antiguo. ¡Parecía como si estuviera viviendo en un castillo! El personal de recepción fue extremadamente amable y servicial, y la ubicación cerca de la catedral fue perfecta para explorar a pie. Además, la tranquilidad del lugar durante la noche fue maravillosa.

Hubo algunas cosas que no me gustaron tanto. Primero, el olor a cañerías en la habitación fue bastante desagradable.

Ubicación inmejorable, vistas espectaculares, solera de los edificios magnífica y entrañable, tranquilidad sin ruidos, desayunar y cenar en la terraza con buenas vistas.

Todo fue perfecto.

Mi estancia en Posada San José fue maravillosa. Pasamos una noche en este encantador hotel y quedamos fascinados. La habitación tenía una pequeña zona separada junto a la ventana con una mesita y dos asientos, perfecta para disfrutar de una copa por la noche o un desayuno en la habitación. Las vistas desde la habitación eran espectaculares y el aire era increíblemente limpio al abrir la ventana. Además, el edificio era precioso y se encontraba en la mejor ubicación de Cuenca. El lugar para desayunar era muy bonito, con vistas impresionantes y música ambiental a un volumen adecuado.

Ubicación ideal, historia de la casa, personal excepcional, precios razonables, vistas increíbles, desayuno opcional.

Nada, todo fue perfecto.

El edificio es impresionante y tiene calefacción. La habitación era fenomenal, con una amplia terraza y vistas a la Hoz del Huecar. La cena en el restaurante fue de excelente calidad. El personal fue amable y atento. La ubicación es excelente, cerca de museos y puntos de interés.

Vistas increíbles, amabilidad del personal, opción de alojar mascotas, restaurante fascinante, trato familiar.

No hay nada que no me gusta.

La ubicación de la Posada San José es sencillamente excepcional. Está situada en pleno casco antiguo de Cuenca, ofreciendo un entorno romántico y pintoresco. También destacan las vistas desde la habitación, que son simplemente maravillosas. Despertar y contemplar ese paisaje es todo un placer. Además, el trato del personal es muy profesional y amable.

Algunos aspectos que podrían mejorar son el desayuno buffet, que no está a la altura de la relación calidad-precio, y el precio de la posada, que resulta algo elevado para ser un alojamiento de dos estrellas.

Me encantaron las vistas espectaculares desde el comedor del hotel, realmente impresionantes. Además, el tamaño de la habitación me sorprendió gratamente, era más grande de lo que esperaba. Otro aspecto positivo fue el trato del personal, fueron muy amables y serviciales.

No me gustó tanto la comodidad de la cama, no era tan cómoda como esperaba. También tuve problemas con las toallas, estaban un poco sucias y tuve que pedir que las cambiaran.

Mi estancia en la Posada San José fue excepcional. La ubicación en el centro histórico de Cuenca me permitió explorar fácilmente los lugares de interés turístico, como la Plaza Mayor y la Catedral, que estaban a solo unos minutos a pie. Además, las vistas desde el hotel eran espectaculares, especialmente de la Hoz y el Parador de Cuenca. El edificio de la posada era encantador, con un estilo rústico que recordaba su pasado histórico. Aunque la decoración de las habitaciones era austera, eran cómodas y tenían todas las comodidades necesarias. Aunque había algunas pequeñas desventajas, como la falta de aire acondicionado y la limitada variedad de alimentos en el desayuno, en general, recomendaría este hotel. En general, recomendaría este hotel para una estancia en Cuenca.

Nos alojamos en un encantador hostal en el centro histórico, cerca de la catedral. La habitación era amplia y tenía una hermosa vista desde la ventana. Además, el personal fue atento y agradable. El desayuno, aunque no estaba incluido, era una opción deliciosa. Disfrutamos de la conexión wifi gratuita y la ubicación central del hostal fue perfecta para explorar la ciudad.

El servicio de limpieza dejó mucho que desear al no hacer una limpieza completa de la habitación todos los días.