La habitación espaciosa y acogedora, ideal para nuestra gran familia. Los desayunos caseros espectaculares. ¡Paloma nos trató con tanto cariño que nos sentimos como en casa!

Mi mujer dice que las camas podrían ser más grandes.

El lugar emanaba tranquilidad y belleza, con una cercanía ideal a puntos de interés turístico. La atención de Paloma fue maravillosa; sus recomendaciones acertadas nos permitieron descubrir joyas locales. Los desayunos, especialmente los bizcochos caseros, fueron deliciosos. La posada estaba decorada con gran gusto y se notaba su cuidado, brindando un ambiente acogedor y cómodo. Sin duda, un sitio mágico para desconectar y descansar.

para mí, nada 🌟

La vista de la pieza a los campos era lo más, y re cerca de la costa e interior de Cantabria para ir de joda. ¡Volvería sin dudar! Lo único que le faltaría para los fiesteros como nosotros sería algún evento nocturno organizado en la terraza para conocer a más gente de nuestra onda. ¡Sería lo más!.

La atención del personal fue excepcional, siempre dispuestos a ayudar y muy amables. Me encantó que ofrecieran recomendaciones de visitas en la región y que dieran facilidades para algunas actividades con descuento. La ubicación era perfecta para explorar Santander y sus alrededores, así como otras localidades como Santillana del Mar y Comillas.

En cuanto a las instalaciones, las camas eran un poco pequeñas y se podía escuchar algo de ruido de las habitaciones contiguas. Aunque no fue algo grave, podría afectar la comodidad en ciertos momentos.

Facilidades acogedoras y confortables, habitación amplia con terraza, desayuno continental completo, ubicación perfecta para explorar la zona.

Me sentí como si estuviera en casa, no tengo ninguna queja en absoluto.

Ubicación ideal, vistas magníficas, acogedora terraza, atención excepcional, recomendaciones acertadas. Estoy totalmente satisfecho.

Increíble trato y atención personalizada de Paloma y su madre! Localización perfecta y encanto único.

La atención de Paloma fue excepcional, ofreciendo desayunos deliciosos con bizcochos caseros y una ubicación ideal para visitar pueblos y playas. Las habitaciones rurales con vigas de madera tenían un encanto especial, y la presión del agua en la ducha era perfecta, algo que valoro mucho. La cercanía a todo y la comodidad de las camas fueron destacables. ¡Para repetir sin duda!

Por supuesto que recomiendo este hotel.

Encantadora estancia en un rincón de Cantabria

La ubicación de la posada es ideal para explorar toda Cantabria, con fácil acceso a las principales vías. La propietaria, Paloma, brinda un trato excepcional, ayudando con recomendaciones acertadas y gestionando la compra de entradas a lugares de interés. La terraza es un remanso de paz con vistas magníficas, perfecta para descansar y relajarse.

Enrolle a los huéspedes con historias de los deliciosos sabores ibéricos y hallazgos culinarios locales que te transportan a un viaje épico.

A pesar de la falta de conexión WIFI y la TV modesta, ¿quién necesita pantalla con esos hermosos paisajes? Aquí, el verdadero lujo es desconectar de la rutina diaria y dejarse llevar por la belleza natural que rodea el lugar.

Me encantó la habitación con balcón y vistas a la montaña. La cama individual era súper acogedora y el baño con artículos de aseo gratuitos fue un plus. Como amante del karaoke y los casinos, ¡me sentí como en casa!

Quizás eché de menos un poco más de espacio en el baño, pero eso es solo mi opinión.