nuestra estancia en Villardiegua de la Ribera fue absolutamente maravillosa. La Posada Real La Mula de los Arribes superó nuestras expectativas. Manuela y Andrés fueron unos anfitriones excepcionales, siempre atentos y amables. El entorno natural era impresionante y pudimos disfrutar de hermosos paseos con nuestra mascota. El desayuno casero y el arroz zamorano fueron una delicia. Sin duda, volveremos a este lugar mágico.

Lástima que el jardín no estuviera bien cuidado.

La estancia en La Mula De Los Arribes fue espectacular. Los propietarios, Manuela y Andrés, nos recibieron con amabilidad y nos brindaron información precisa sobre la zona. La habitación era acogedora y las vistas eran impresionantes. Disfrutamos de la tranquilidad y la comida del comedor, que era deliciosa. Recomiendo este lugar para aquellos que buscan tranquilidad y sosiego.

Me sentí realmente como en casa, no tengo ninguna pega.

Esta encantadora posada rural en una pequeña aldea al norte de Zamora es un lugar perfecto para desconectar. Sus dos edificios de piedra tienen una decoración rústica y acogedora. Las habitaciones, algunas de ellas permiten mascotas, ofrecen todas las comodidades necesarias. El pequeño restaurante de la posada sirve comida casera y deliciosa, utilizando ingredientes frescos de la huerta. Además, la ubicación de la posada es ideal para explorar la comarca y disfrutar de su hermoso paisaje.

El tiempo de estancia en la posada fue demasiado corto.

Qué bonita jornada caminando por el GR14, etapa 22. Llegamos a esta agradable Posada que nos ha sorprendido por su acogedora limpieza y deliciosa comida. El trato recibido por los posaderos fue el mejor, prometemos volver con familiares o amigos. Gracias Andrés por la información y el rato agradable en la terraza con Manolo. Mención especial a la cocinera Manuela, merece un 10.

Imposible encontrar algo. 😊

Nuestra estancia en Posada Real La Mula de los Arribes fue perfecta. Fuimos a celebrar nuestro aniversario de bodas y nos encantó. Andrés y Manuela son muy amables y atentos, siempre dispuestos a ayudar. El hotel está cuidado al detalle, con una decoración encantadora. El desayuno y las cenas son deliciosos, con productos naturales de su huerta. Además, la ubicación es ideal para hacer senderismo en la GR14 y disfrutar del río Duero. Nos dieron mapas y recomendaciones de qué visitar, lo cual fue muy útil. ¡Todo fue genial!

100% Recomendable.