Me enamoré de la habitación 402 con sus ventanas desde las que se veían las cúpulas de las iglesias. El hotel es muy moderno en cuanto a confort. Excelente ubicación. El personal amabilísimo. El desayuno muy bueno y la comida de su restaurante del primer piso muy rica. Adoré este hotel y sin dudas voy a volver!

Nada negativo 👍

Buena ubicación en el centro histórico. Habitaciones grandes y cómodas. Desayuno con productos de calidad. Restaurante recomendable. Personal amable.

Habitaciones cómodas y limpias. Desayuno variado y delicioso. Personal atento y amable. Excelente ubicación.

No había nada que no me gustara.

Buen precio y modernas instalaciones en casco histórico. Habitación cómoda y personal amable, especialmente Cristina. Esfuerzo por hacer la estancia cómoda. Desayuno completo y ubicación ideal cerca de la Catedral y opciones gastronómicas. Vistas preciosas desde la habitación en el último piso. Recomendable 100%.

Habitación espaciosa y cómoda. Ubicación excelente en el centro. Trato del personal excelente. Desayuno variado y de calidad

Todo estaba en orden.

El hotel tiene una ubicación excepcional, en una zona turística cerca de muchos restaurantes y tiendas. Además, está justo en el centro de la ciudad vieja y cercana a la catedral. Las habitaciones son amplias y luminosas, con maravillosas vistas a las torres de la catedral. El personal es atento y dispuesto a ayudar, y el hotel está muy limpio. hay un minibar con precios como en cualquier bar, y la cama es muy cómoda. El baño es amplio y cómodo, con toallas de buena calidad y suficientes amenities.

Por la noche, el hotel se queda solo y no hay nadie en la recepción, lo que puede generar inseguridad en caso de necesitar algo o tener algún problema específico.

Mi estancia en Hotel San Miguel fue perfecta. Estuve en el hotel durante varios días y tanto la ubicación, la limpieza y el desayuno superaron mis expectativas. El trato del personal, especialmente de Luisa, fue destacable. El desayuno era excelente, con zumo de naranja recién exprimido, bollería casera y embutidos, incluyendo yogur casero. Además, me encantó la habitación en la buhardilla, una auténtica maravilla.

No dudaría en recomendar este hotel.

El hotel está en una plaza tranquila, en una zona muy tranquila, lo que te permite descansar y relajarte después de un día explorando la fascinante ciudad. Además, las habitaciones tienen un pequeño balcón que permite la entrada de luz natural y aire fresco, lo cual es muy especial. También me gustó que el hotel tenga habitaciones especialmente diseñadas para personas con discapacidad, lo cual demuestra su atención a las necesidades de todos los huéspedes. Por último, el desayuno es muy bueno y te da un buen comienzo del día antes de salir a explorar esta fascinante ciudad.

Todo fue genial, no hubo nada que decir.

El hotel cuenta con una ubicación inmejorable, en una zona turística muy cerca de la catedral. Además, las instalaciones son limpias y cómodas, con un bonito jardín interior. El desayuno es rico y el personal es encantador y servicial.

Nada de nada.

Habitaciones cómodas, ubicación céntrica y vistas panorámicas de la zona antigua. Atención amable y rápida ante cualquier necesidad. Desayuno variado y delicioso.

Ubicación perfecta, cerca de todo. Cuartos amplios y cómodos. Vistas espectaculares. Personal amable y atento.

Es difícil recordar algo.

Las instalaciones limpias y modernas. Habitación amplia y luminosa. Personal agradable y atento. Ubicación perfecta en el centro histórico.

No me puedo quejar de nada.

La ubicación del hotel es perfecta, justo en el casco histórico de la ciudad. Las habitaciones son nuevas, decoradas con buen gusto y muy cómodas. Además, el desayuno es delicioso. Aunque no tienen parking, tienen un convenio con uno cercano.

La ubicación cerca de los principales lugares de interés y en una zona muy tranquila. La limpieza impecable en todo el hotel y las instalaciones en perfectas condiciones. El personal muy atento y disponible para cualquier duda.

Na.

El hotel cuenta con una ubicación espectacular, cerca de un museo, una iglesia, un monasterio y una catedral. Las habitaciones son amplias y cómodas, con hermosas vistas al jardín. El personal es amable y servicial, dispuesto a brindar información sobre rutas y lugares de interés. El restaurante ofrece comida de alta calidad, sin excesivas florituras.

Todo bien.