Absolutamente mágico, desconexión total con la naturaleza, perfecto para relajarse. Multitud de actividades, instalaciones acogedoras, paisaje impresionante. Cenas y desayunos magníficos. Chef excelente. Rutas a caballo espectaculares. Atención amable y recomendaciones útiles del personal. Recomendable.

Nada, todo es maravilloso.

Ubicación idílica, personal excepcional, muchas posibilidades de rutas de senderismo, desayuno y cena con vistas magníficas.

Nada malo.

La ubicación del Tambor es espectacular, rodeada de senderos y con vistas preciosas. El hotel en sí es bonito y acogedor, con una terraza de ensueño donde disfrutar de una cervecita al atardecer. La piscina es espectacular y el servicio es excelente, tanto el dueño como la cocinera son amables y atentos. La comida es deliciosa, al nivel de un hotel de 5 estrellas. Además, el ambiente es muy especial, con un equipo amigable y cercano que hacen de las cenas una experiencia muy agradable.

Nada en absoluto de lo que quejarse.

Nos alojamos en este lugar durante dos noches y la experiencia fue maravillosa. El entorno natural es impresionante, con hermosas vistas y tranquilidad absoluta. Las habitaciones son amplias, nuevas y limpias, al igual que los baños. El personal es amable y acogedor, siempre dispuesto a garantizar que disfrutemos de nuestras vacaciones. Además, el desayuno es delicioso, con opciones saludables y de calidad. hay una terraza y un salón comunitario para relajarse y disfrutar de las estrellas.

El acceso a este lugar puede ser un poco complicado debido a la carretera llena de piedras.

El lugar es perfecto para desconectar y apreciar la belleza del parque. También tienen paseos a caballo para disfrutar de la naturaleza. La atención del personal es excelente y aceptan animales. El paisaje y la piscina son espectaculares.

Me sentí como un rey, no tengo ninguna queja.

Mi estancia en este lugar fue simplemente increíble. Desde el momento en que llegué, me sentí totalmente desconectado de la rutina y conectado con la naturaleza. Las instalaciones eran impecables y las habitaciones espaciosas y limpias. Además, el personal fue extremadamente amable y profesional, atendiéndome de manera excepcional. Disfruté mucho de la comida, que estaba deliciosa y preparada con gran atención al detalle. me resultó muy conveniente contar con un aparcamiento en el hotel y la ubicación era realmente pintoresca. En resumen, esta estancia superó todas mis expectativas.

Imposible encontrar algo negativo en esta experiencia. Todo fue absolutamente perfecto.

Hermosa ubicación en la Sierra de Grazalema. Piscina integrada en el entorno natural. Habitaciones bien equipadas. Menú nocturno excelente. Perfecto para desconectar del mundo exterior.

Nos alojamos en un hotel rural en plena naturaleza, rodeado de un entorno espectacular donde pudimos realizar diversas actividades. Las habitaciones eran cómodas, limpias y agradables, especialmente las camas, en las que se podía descansar muy bien. Además, el personal era amable y nos proporcionó información sobre las rutas a realizar. disfrutamos de un amplio y moderno baño.

Durante nuestra estancia nos encontramos con una familia con niños que no paraban de alborotar, lo cual resultó incómodo para el resto de los huéspedes.

Personal atento, cuidado del recinto, habitaciones excelentes, entorno tranquilo, piscina sorprendente.

Nada, todo bien.

Las habitaciones son espaciosas, limpias y cómodas. Las zonas comunes del hotel son estupendas y están bien cuidadas.La comida está deliciosa, con un gusto exquisito.El hotel ofrece actividades como senderismo y rutas a caballo.El entorno natural es espectacular, rodeado de encinas y alcornoques.El desayuno y la cena son deliciosos.El personal, especialmente Teresa, es muy servicial y nos brindó valiosos consejos sobre las excursiones de senderismo.

No hay nada que no nos haya gustado.

El personal amable y atento, las instalaciones limpias y bien cuidadas, el entorno natural y tranquilo, la comida deliciosa y la opción de cestas de picnic.

Me sentí muy bien, no tengo ninguna queja en absoluto.

Tranquilidad, vistas, silencio y atención del personal excepcionales. Ruta a caballo de 4 horas hasta un pueblo cercano. Rutas de senderismo bien marcadas. Cena y desayuno deliciosos. Piscina única. ¡Volveremos!

nuestra estancia en grazalema fue simplemente increíble. tambor del llano nos sorprendió gratamente con su ubicación en plena sierra, el trato amable y familiar del personal y la comodidad de las habitaciones. pudimos disfrutar de hermosos paseos por los senderos y relajarnos en la espectacular piscina. ¡esperamos volver pronto!

Iluminación de la habitación poco fiable.

El hotel está ubicado en un entorno natural impresionante, rodeado de montañas y en plena tranquilidad. Las habitaciones son cómodas y limpias, con todas las comodidades necesarias. El desayuno es magnífico, con una amplia variedad de opciones deliciosas. Además, el personal es amable y atento, siempre dispuestos a ayudar y ofrecer recomendaciones de excursiones y actividades.

A veces puede haber dificultad para realizar reservas en el restaurante por falta de comunicación.