Me encantó **la ubicación** del hotel, tan cerca de los bares y restaurantes. Perfecto para explorar la Serraína de Cuenca. El personal es muy amable y atento. ⭐️

La ubicación es genial, buen precio y la comida excelente. El personal amable, habitación amplia y cama cómoda. El desayuno tiene mucha variedad y el restaurante ofrece opciones a buen precio. Disfrutamos del ambiente relajado del jardín. Único punto negativo fue la temperatura difícil de regular en la habitación, pero no arruinó la experiencia general. 🌴

La relación calidad-precio en Torremangana fue excepcional, la habitación era muy amplia y cómoda, y el personal encantador y atento. La ubicación era perfecta, cerca de todo pero en una zona tranquila con mucha vida.

La comida del desayuno podría ser más variada para mejorar la experiencia.

La habitación era súper acogedora y tenía todo lo que necesitaba, incluyendo bañera, secador de pelo y amenidades. Me sentí muy cómodo con el WiFi gratis y el aire acondicionado. La vista a la calle desde mi habitación era maravillosa.

Aunque en general todo fue genial, diría que la única cosa que no me convenció del todo fue el tamaño del minibar.

Elegí este hotel para asistir a un foro empresarial porque ofrece 4 salas de reuniones. Está bien ubicado, limpio, con habitaciones amplias y restaurante con horario extendido. Las camas son cómodas y el descanso de calidad.

Eché de menos tener un servicio de impresión y escaneo disponible para mis necesidades de trabajo.

Me encantó la decoración clásica y acogedora del hotel, especialmente en las zonas comunes. Los pasillos amplios y bien iluminados fueron fáciles de transitar para personas mayores como yo. Además, la accesibilidad del hotel en general, con ascensores y pasillos espaciosos, hizo que mi estancia fuera muy cómoda.

Me gustaría que el personal del hotel fuera más atento a las necesidades especiales de las personas mayores, como ofrecer opciones de entretenimiento o actividades adaptadas para nosotros.

La ubicación céntrica es genial y la amplitud de la habitación muy cómoda. El personal fue amable, aunque la recepción podría mejorar. Las áreas comunes modernas contrastan con la necesidad de renovación de las habitaciones. En general, una estancia decente con algunos aspectos a considerar.

El servicio de habitaciones, la limpieza, y el personal del restaurante y bar fueron realmente excelentes. Las camareras de la limpieza y las chicas del bar y la zona exterior fueron realmente amables y serviciales. El desayuno era agradable, con una buena selección de frutas y panes. Había suficiente de todo para una noche, y había muchas posibilidades de aparcamiento alrededor del hotel. La ubicación era ideal para explorar el casco antiguo de Cuenca, ya que podías llegar a la hermosa Ciudad Encantada y al Puente San Pablo fácilmente.

Sería genial si mejoraran un par de cosas, como la limpieza más profunda de las habitaciones para evitar encontrar restos de productos anteriores. Además, el mobiliario y la climatización podrían ser actualizados para estar más acorde con la calidad del hotel.

La ubicación del hotel es excelente, con fácil acceso al centro histórico y rodeado de comercios y restaurantes. El personal es muy amable y servicial, siempre dispuesto a ayudar. A pesar de algunos detalles mejorables en las instalaciones, la estancia fue agradable gracias a la atención recibida.

Se podría mejorar la calidad de los servicios y amenities ofrecidos, así como la actualización de las instalaciones para corresponder con la categoría del hotel.

La ubicación del hotel es excelente, cerca del centro urbano y en una zona peatonal. Las habitaciones son amplias y la relación calidad-precio es buena. Disfruté de la tranquilidad del jardín para relajarme. Además, pudimos visitar diversos lugares cercanos como el Museo Paleontológico de Castilla-La Mancha y el Castillo de Moya, lo que enriqueció nuestra estancia en familia.

Durante mi estancia, descubrí paseos históricos, un entorno natural impresionante y una gastronomía local deliciosa en este hotel que ofrece comodidades modernas y servicio excepcional. Desde mi habitación elegante con bañera, hasta las opciones de comida típica y actividades locales, todo fue perfecto. ¡Incluso pude relajarme en la bañera de hidromasaje de la suite! Una experiencia que superó mis expectativas y me hizo sentir como en casa. ¡Volveré! ¡Seguro que sí, catalana hasta la médula!

qué gran sorpresa: la habitación espaciosa y bien equipada, con camas cómodas y súper limpia. la ubicación del hotel es genial, en una zona agradable y cerca del casco histórico. el personal súper amable y el desayuno tipo buffet incluido en la habitación fue excelente.

Recomendaría este lugar.

Mi estancia fue genial. La ubicación cerca de bares y restaurantes fue lo mejor. Volvería, pero las habitaciones parecían mejores en fotos. ¡Increíble personal! ¡Volvería! ¡Me encantó!

llegué al hotel con grandes expectativas y ciertamente no me defraudó. La habitación era amplia y tenía todas las comodidades exclusivas que buscaba: una cama increíblemente cómoda, amplio espacio y una temperatura perfecta. Las vistas desde la habitación eran impresionantes y la ubicación del hotel era ideal, cerca del animado casco antiguo pero en una zona tranquila. Además, pude disfrutar de la cafetería que estaba al lado del hotel, donde la comida era deliciosa y el personal encantador.

Hubo un pequeño inconveniente. Aunque la habitación estaba en general limpia, encontré polvo detrás de las puertas y hasta una uña cortada.

Ay, qué sabroso sabor nos dejó Torremangana en Cuenca! Entre platos calientes y joyas culinarias, el hotel brilló con camas cómodas y una ubicación envidiable. Aunque la limpieza superficial y la falta de transparencia en el parking hicieron sombra, el encanto de los paisajes y la cercanía a tesoros gastronómicos como El Meson y La Blonda iluminaron nuestra estancia. Con un toque de autenticidad y un aroma a Castilla-La Mancha, este viaje fue un festín de contrastes. ¡Volveremos por más delicias y rincones por descubrir!