Ubicado en las colinas detrás de la ciudad costera, este hotel rural ofrece un entorno tranquilo y acogedor. Las habitaciones, amplias y muy limpias, brindan comodidad y privacidad. Los propietarios y su familia son amables y siempre dispuestos a ayudar. Además, el desayuno abundante y variado asegura un buen comienzo del día. Los viajeros también pueden disfrutar de un jardín encantador y de fácil aparcamiento en la zona.

Me encantó la ubicación tranquila y bonita. Habitaciones amplias y limpias. Personal amable y buen desayuno. Vistas impresionantes desde el hotel.

Me gustó todo.

Lo mejor del hotel fue la amabilidad del personal y la limpieza excepcional de las habitaciones. Además, el desayuno era muy completo, con una gran variedad de opciones para elegir. También disfruté de la ubicación del hotel, ya que estaba cerca de la playa y de algunos restaurantes, lo que facilitó mi estancia. Sin duda, fue una experiencia cómoda y agradable.

Lo que menos me gustó fue el ruido en el pasillo de acceso a las habitaciones, ya que no había una puerta de separación que lo evitara. El comportamiento de algunos huéspedes también resultó molesto en ocasiones.

estuvimos más tiempo en sanxenxo y decidimos quedarnos en el seixalvo, fue una excelente elección. el trato de juan y lina nos hizo sentir como en casa desde el primer momento. la limpieza impecable y la cocina de lina, una delicia. sin duda, un lugar al que queremos volver.

desayuno escaso

Lo mejor del hotel fue la amabilidad del personal y su disposición para hacer nuestra estancia agradable. Además, el desayuno incluido fue una gran ventaja, con una amplia variedad de opciones para elegir. Otro aspecto destacable fue su ubicación, cerca de playas y con bonitas vistas a la ría.

Como punto negativo, el hotel no contaba con ascensor, lo cual puede resultar incómodo para personas con movilidad reducida o que tienen dificultades para cargar las maletas.

Buen desayuno con vistas bonitas. Familia excepcionalmente atenta. Limpieza e higiene impecables. Aparcamiento gratuito amplio. Ambiente cálido y familiar. Cerca de Sanxenxo. Jardín precioso con vistas a la ría. Personal muy agradable.

No pude encontrar ningún fallo.

El hotel está situado en una zona rural, en las colinas detrás de la ciudad. Ofrece vistas hermosas de la ría desde las habitaciones y cuenta con un jardín precioso para disfrutar. Las habitaciones son amplias y las camas son muy cómodas. El personal es amable y acogedor, haciendo que te sientas como en casa. Los desayunos son deliciosos y completos, incluyendo pan recién hecho, fruta, café y más.

La señal wifi en las habitaciones puede ser débil, aunque es suficiente para el uso básico del móvil.

Nuestra ubicación en Rural Seixalvo fue perfecta. Estábamos buscando un lugar tranquilo y alejado del bullicio, pero a solo dos minutos en coche de Sanxenxo. Las habitaciones eran amplias y contábamos con estacionamiento, lo cual era muy conveniente. El personal fue amable y el desayuno delicioso. Quiero resaltar la limpieza impecable de todo el lugar, ¡realmente me impresionó!

Nada, realmente fue perfecto.

Situado en las colinas detrás de una conocida localidad costera, este tranquilo hotel ofrece unas vistas impresionantes y un entorno rural muy bonito. Las instalaciones son totalmente nuevas, bien equipadas y con una decoración moderna y rústica. Además, el servicio es excepcional, con un trato amable y cercano por parte del personal. Las habitaciones son muy cómodas y limpias, y el desayuno casero ofrece opciones deliciosas recién hechas.

Aunque el personal es amable, hubo una situación en la que se sintió un poco exigente y arisco en cuanto al horario de salida de la habitación.

El trato del personal del hotel fue excepcional, siempre muy amables y dispuestos a ayudar en todo momento. Además, la limpieza del lugar era impecable, todo estaba muy ordenado y reluciente. Además, me encantó la ubicación del hotel, ya que estaba en una zona tranquila, alejada del bullicio pero aún así cerca de todo. Fue genial poder disfrutar de la tranquilidad y al mismo tiempo tener acceso fácil a todas las atracciones cercanas.

Hubo algunos aspectos negativos durante mi estadía. Por un lado, el desayuno dejaba mucho que desear.

Nos encantó el entorno y la tranquilidad de Rural Seixalvo. Los dueños fueron muy amables y nos hicieron sentir como parte de la familia. Juan era muy divertido y nos dio excelentes consejos y recomendaciones. Su cálida hospitalidad fue inigualable. Además, la ubicación del hotel era perfecta para explorar la zona y el parking privado gratuito fue una gran ventaja. La limpieza del alojamiento también fue destacable, al igual que el delicioso desayuno casero servido en la mesa. ¡Nos encantó nuestra estancia en Rural Seixalvo y estamos ansiosos por volver!

No hay nada que no nos haya gustado. ¡Todo fue excelente!