fue una experiencia maravillosa rodeada de naturaleza y tranquilidad. La anfitriona fue encantadora y nos preparó una cena deliciosa en la yurta. Nos sentimos como en casa y definitivamente volveremos.

Faltaba un poco de limpieza en la ropa de cama y los lugares para sentarse. También necesitaríamos más vajilla.

Pasamos una noche excepcional en medio de la nada, rodeados de campos de olivos. La anfitriona fue muy amable y nos preparó una deliciosa cena que disfrutamos en la yurta misma. Además, el desayuno fue de alta calidad, con fruta fresca, yogur, queso.

El calor dentro de la yurta en verano era insoportable, no había ventilación y tuvimos que llevar un ventilador.

el paisaje, el entorno y la yurta crearon una experiencia especial y única. La cena y el desayuno al aire libre fueron maravillosos. El personal fue amable y generoso. Perfecto para amantes de la naturaleza y aquellos que buscan paz y tranquilidad.

Baño separado y falta de autonomía en las comidas.

disfrutamos de un descanso inmejorable en camarles. yurta mongola delta del ebro superó nuestras expectativas con su encanto apartado, sonido de ranas y relajante ambiente. el personal amable y acogedor nos hizo sentir como en casa. sin duda recomendado y volveremos pronto.

Falta de ventilación en la yurta.