Este hotel está perfectamente ubicado, justo al lado de la playa. Es genial poder salir del hotel y caminar unos pocos pasos para disfrutar del mar. Además, está cerca de restaurantes y tiendas, por lo que puedes tener todo lo que necesitas a tu alcance. La habitación en la que nos alojamos era cómoda y espaciosa, y el baño estaba limpio y bien equipado. El personal fue muy amable y servicial, brindándonos asistencia en todo momento. El desayuno también fue bueno, con una variedad de opciones para elegir.

Hubo un problema con el agua de la ducha, que salía amarilla y se salía del baño. Esto fue bastante incómodo durante nuestra estancia.

Lo mejor de todo fue la ubicación del hotel, ya que estaba justo junto a la playa y muy cerca del mercado y de varios restaurantes. Además, el desayuno que ofrecían era muy completo y las habitaciones eran súper amplias. nos encantó la tradicional imagen tailandesa que tenía el resort, realmente hermoso e impresionante. Por último, queremos destacar la amabilidad y preocupación del personal, que siempre estuvieron dispuestos a ayudarnos con cualquier cosa.

Todo estupendo.

Amplias habitaciones con balcón, aire acondicionado eficiente. Desayuno completo con opciones occidentales y locales. Ubicación frente a la playa, cercano a restaurantes y casas de cambio. Personal amable y servicial. Respeto por la tradición tailandesa en el diseño del resort.