Entorno fabuloso, desayuno delicioso, personal amable, edificio precioso, jardines de cuento.

Todo fue fantástico.

Me encantó hospedarme en este hotel, ubicado en una antigua abadía rodeada de jardines maravillosos. Las habitaciones eran muy cómodas y las instalaciones estaban en perfecto estado. El desayuno era abundante y delicioso. Además, pude disfrutar de un agradable paseo por la zona del jardín y el centro de la ciudad. Fue una experiencia inolvidable.

El único inconveniente fue que a veces se podía oír música proveniente de las bodas que se celebraban en el hotel, pero no fue algo demasiado molesto.

He pasado un tiempo increíble en Coombe Abbey, un hotel de gran calidad situado en un hermoso parque. La comodidad de la cama en nuestra habitación fue excepcional y el personal fue muy profesional y amable. El restaurante del hotel ofrece una excelente comida, con un amplio menú para la cena y una buena selección para el desayuno. Además, el hotel en sí es un edificio precioso, con detalles antiguos y un ambiente encantador. Los jardines y la fachada parecen sacados de un cuento de hadas, con un foso con cisnes alrededor. También disfruté explorando las diferentes y hermosas habitaciones, cada una con su propio encanto único. Recomiendo encarecidamente Coombe Abbey para aquellos que buscan un lugar especial y tranquilo para alojarse.

De verdad que lo aconsejo.

El hotel es un destino en sí mismo. Nos encantó la temática y la sensación de estar alojados en un palacio de época. Los jardines y la fachada del hotel son preciosos y nos transportaron a un cuento de hadas. Además, la limpieza y las instalaciones del hotel están impecables. Tuvimos la suerte de disfrutar de un delicioso desayuno, que era tan sabroso como el que hacía mi madre. El personal del hotel también merece una mención especial, ya que fueron muy amables y serviciales en todo momento.

Casi perfecto. No encontramos ninguna desventaja durante nuestra estancia en este hotel.

El hotel tiene un entorno y edificio impresionantes, lleno de antigüedades. El desayuno es delicioso y el personal es amable y atento. Las habitaciones son bonitas y diferentes. Es un lugar perfecto para escaparse y estar rodeado de naturaleza.