Nos alojamos en un hotel en el centro del casco antiguo de la ciudad. La ubicación era perfecta, en un callejón tranquilo y a solo unos pasos de todos los puntos de interés. La habitación era cómoda y limpia, con una bonita vista desde la ventana. El personal fue amable y servicial, y el desayuno era abundante y delicioso, con una buena variedad de productos. Sin duda, una gran elección.

El tamaño del baño era un poco ajustado, aunque no incómodo.

Este hotel ofrece una excelente relación calidad-precio. Las habitaciones son cómodas y cuentan con detalles bien cuidados, como una tetera para hacer té o café. La ubicación es perfecta para explorar el centro de la ciudad, ya que se puede llegar andando a cualquier sitio. Además, el personal es amable y atento, siempre dispuesto a ayudar y ofrecer recomendaciones. Sin duda, uno de los aspectos destacados es el desayuno incluido, con una variedad de opciones para satisfacer a todos los gustos.

Todo fue estupendo.

Mi estancia en Ibis fue maravillosa. Estuvimos en el hotel por tres días y su ubicación nos permitió desplazarnos fácilmente por la hermosa zona antigua de la ciudad. El personal fue amable y siempre estuvo dispuesto a atender nuestras necesidades. Agradezco especialmente a Alberto y Olaya por tratarnos de forma excepcional en nuestro idioma. Además, la cama y el desayuno fueron muy buenos y pudimos dejar nuestro equipaje en consigna y utilizar el servicio de caja de seguridad en recepción. ¡Realmente disfruté de todo! La ubicación es ideal, cerca de la estación de tren y en pleno centro histórico. Es una zona segura con cafeterías, bares y restaurantes cercanos de excelente calidad. La atención del personal fue inmejorable y realmente aprecié que alguien tocase a mi puerta para despertarme cuando no había teléfonos. La habitación era cómoda y estaba bien insonorizada. Lo que más me encantó fue que la fachada del hotel conserva el encanto de esta parte de la ciudad.

De verdad que lo aconsejo.

Buena ubicación, personal amable, cama cómoda, hotel tranquilo y moderno.

La ubicación del hotel es excelente, en pleno centro de la ciudad, cerca de bares, restaurantes y tiendas. Además, está muy cerca del castillo y de la famosa calle Royal Mile. El personal del hotel fue muy amable y servicial. La habitación estaba muy limpia y contaba con todas las comodidades necesarias. El desayuno también fue muy completo, con opciones calientes y frías.

Sin problemas.

Mi estadía en Ibis fue excelente. El hotel está ubicado en una zona muy conveniente, cercana a la estación de tren y a solo media cuadra de la calle principal. Es muy céntrico y seguro, lo que nos permitió caminar por la zona en cualquier momento del día. Además, hay varios restaurantes y bares de calidad cerca. La atención del personal del hotel fue muy buena, especialmente aquellos que hablaban español. Agradezco especialmente que alguien tocará la puerta de mi habitación para despertarnos, ya que no había teléfonos disponibles. La habitación era cómoda y las ventanas insonorizadas, lo cual se agradece. Y lo más destacado es que la fachada del hotel conserva el encanto de la zona antigua de Edimburgo.

Para nosotros, el hotel fue ideal.

La ubicación es perfecta, en pleno centro y cerca de todos los lugares de interés. El personal fue amable y servicial. La habitación era cómoda y agradable.

El precio era un poco elevado. El desayuno también era caro, por lo que optamos por ir a otros lugares cercanos.

Ubicación excelente, personal amable, habitación cómoda, tranquilo, desayuno ok, hotel moderno y limpio.

No había nada que no me gustara.

Me encantó mi estancia en Ibis. La ubicación es inmejorable, en pleno centro de la ciudad y cerca de todo. La habitación era cómoda y tenía todo lo necesario para una estancia agradable. Además, el personal fue amable y servicial. Sin duda, volvería a reservar en Ibis la próxima vez que esté en Edimburgo. En resumen, recomendaría este hotel sin dudarlo.

Este hotel está ubicado en el centro de una hermosa ciudad, muy cerca de la estación de ferrocarril. Además, se encuentra en el centro del casco antiguo, lo que lo hace perfecto para explorar y disfrutar de la historia de la ciudad. es muy conveniente en cuanto al transporte local, ya que está cerca de la parada de los buses del aeropuerto. Las habitaciones son cómodas, con un servicio amable y un excelente desayuno.

La decoración del lobby deja mucho que desear, no se condice con el estilo del edificio.

El hotel se encuentra en un callejón en el centro de la ciudad, lo que lo hace conveniente para explorar todos los lugares de interés cercanos. La habitación era cómoda, con una cama confortable y un baño adecuado. Además, el servicio era amable y servicial. El desayuno era bueno y las instalaciones del hotel estaban en buenas condiciones.

Quién no ama estar rodeado de la belleza de la naturaleza mientras disfruta de unas vacaciones? Si eres un amante de la naturaleza, te encantará el hotel en el que me hospedé en el centro histórico. La ubicación del hotel es excepcional, justo en el corazón del centro histórico y cercano al castillo. Además, me encantó la comodidad y la limpieza de las habitaciones. La cama era muy cómoda y el desayuno era muy completo, con opciones calientes y frías. aprecié el servicio amable y colaborador del personal de recepción. Sin embargo, una pequeña desventaja fue el tamaño del baño, un poco pequeño para dos personas.

Excelente ubicación, justo en el centro de todo, cerca de la Royal Mile y de la estación de tren. Puedes llegar andando a cualquier sitio en el centro de la ciudad.

Todo estuvo bien, sin ningún problema destacable.

Este hotel tiene una ubicación excelente en el centro de la ciudad. Se puede llegar andando a cualquier sitio en Edimburgo. Además, las habitaciones tienen unas vistas maravillosas. Las camas son muy cómodas y cuentan incluso con una cama extra, lo cual es perfecto para aquellos que viajan en grupos más grandes. También me gustó mucho la ducha, que tenía una buena presión de agua. Otra cosa positiva es que el desayuno estaba incluido y se ofrecían bebidas para adultos, lo cual es ideal para comenzar el día con energía.

Todo estuvo perfecto, no tengo ninguna queja.

Mi estancia en Ibis fue maravillosa. Estuve en Edimburgo por una semana para disfrutar de unas vacaciones y el hotel cumplió todas mis expectativas. Lo mejor de todo fue el desayuno, que ofrecía productos de alta calidad y era muy abundante. Además, siempre estaban reponiendo la comida para que nunca faltara nada. La ubicación del hotel era magnífica, justo en el centro de todo y a poca distancia de la ciudad nueva y de los lugares más alejados. No necesitamos usar el transporte público para explorar la ciudad. También estábamos muy cerca de la parada del autobús al aeropuerto, a solo 5 minutos caminando. El personal del hotel era extremadamente amable y servicial, y había varios empleados que hablaban español. Realmente creo que no podríamos haber elegido un hotel mejor. ¡Fue fantástico!

De verdad que lo recomiendo.