Mi estancia en el Das Corner London City fue excepcional. La habitación era espaciosa y cómoda, con bonitos toques artísticos proporcionados por Café Art. Además, el desayuno en el Motley ofrecía una gran variedad de opciones, incluyendo deliciosas frittatas y una selección de repostería.

Algo a tener en cuenta es que la máquina de café del pasillo necesitaba limpieza, y no se ofreció café en la cafetería hasta el segundo día. A pesar de esto, el personal fue muy amable y servicial durante toda mi estancia.

En cuanto a los aspectos positivos, me gustó mucho el excelente servicio al cliente. El personal del hotel fue amable y atento, siempre dispuesto a ayudar. También disfruté de la gran variedad de opciones saludables en el desayuno. Fue genial poder elegir entre diferentes opciones y empezar mi día de forma saludable. Por último, aunque no estoy seguro de si es una característica única de este hotel, me encantó la ubicación. Estaba rodeado de lugares con buen ambiente y muchas alternativas para comer y tomar algo.

También hubo aspectos negativos que afectaron mi experiencia. Para empezar, sentí un poco de frío en la habitación, especialmente en la que estaba cerca de la ventana.

Me alojé en el hotel The Corner London City durante mi viaje de tránsito y quedé impresionado por su conveniencia. Ubicado a solo 350 metros de Aldgate East, 650 metros de London Whitechapel y a solo 10 minutos a pie de Tower Gateway, este hotel resultó ser la opción perfecta para estar cerca de las principales atracciones de la ciudad sin sacrificar comodidad ni estilo.

Aunque mi estancia fue muy satisfactoria, hubo un pequeño detalle que afectó mi experiencia. La habitación asignada por la aplicación no contaba con ventana y estaba ubicada en el sótano, lo cual generó molestias, especialmente para mi pareja que sufre de claustrofobia.

El diseño bonito y moderno del hotel fue lo primero que nos llamó la atención al llegar. Estaba limpio y no había moquetas, lo cual es un punto a favor para mantener un ambiente fresco y libre de alérgenos. Además, encontramos una máquina de café gratis en los pasillos, lo cual fue un detalle agradable durante nuestra estancia.

En cuanto a los aspectos negativos, el precio del desayuno nos pareció un poco elevado, a pesar de ser de tipo buffet.

La ubicación cerca del metro es perfecta, a solo 2 minutos a pie. Además, el hotel está rodeado de cafeterías y restaurantes, lo que hace que sea muy conveniente. También está muy cerca del centro de la ciudad, por lo que es fácil llegar a lugares como la City o Soderitch a pie. El personal del hotel es muy agradable y profesional, siempre dispuesto a ayudar en cualquier duda o consulta.

No tiene que mejorar nada.

La ubicación era excelente, muy céntrica y cerca de las atracciones principales de la ciudad. Además, el personal del hotel era muy amable y atento, siempre dispuesto a ayudar en lo que necesitáramos. Las habitaciones eran modernas y limpias, con una decoración estilizada. También disfrutamos de un desayuno delicioso, con una amplia variedad de opciones para elegir.

Todo estuvo bien, no puedo encontrar ninguna queja.

El personal fue muy amable y servicial, y también ofrecían la opción de check-in automático al llegar.

La ubicación es perfecta, justo en el centro y cercana a los medios de transporte público, incluyendo la estación de metro. El desayuno es delicioso y variado, con muchas opciones de calidad. El personal del hotel es muy atento y amable.

No me puedo quejar de nada.

El lugar tiene una decoración agradable y ecológica. Hay café y té gratis en el pasillo. La habitación cuenta con plancha y enchufes convenientes para viajeros. Buena ubicación cerca de Bricklane y transporte público. El personal es amable y el auto check-in es una opción conveniente.

Este hotel tiene una excelente relación calidad-precio. Los precios son muy justos y el desayuno está incluido en la tarifa. Además, me encantó el detalle de las habitaciones con camas súper cómodas. También me gustó mucho la ubicación del hotel, que se encuentra en el centro de la ciudad.

Todo genial.

El personal del hotel joven y dinámico hizo que nuestra estancia fuera fenomenal. Las habitaciones limpias a diario y el desayuno bufet muy rico. Agradecemos especialmente a Andrei el chef por las deliciosas cenas. La recomendación de Vanesa sobre una App para moverse por Londres fue muy útil y gracias a eso conocimos la ciudad de otro modo. El trato de Javier, Mihael y Kamile fue súper agradable y atento. El detalle de la máquina de café en los pasillos, la plancha de ropa y el secador añadieron un plus a la comodidad de las habitaciones. También agradecemos la opción de dejar las maletas al llegar o salir. La ubicación del hotel, cerca de varias líneas de bus y del metro, facilitó nuestros desplazamientos. Recomendaría este lugar sin dudarlo.

Habitación sin ventana.

La experiencia en Corner London City fue excelente. El ambiente del hotel era muy agradable, con una decoración muy bien cuidada, tal como se veía en las fotografías. Nos encantó su filosofía de ecología y sostenibilidad. Además, nos sorprendió gratamente encontrar café y té gratuito en el pasillo, así como una plancha en la habitación. También queremos destacar que nos dieron la habitación antes de la hora indicada, lo cual fue muy conveniente. Disfrutamos de la proximidad al centro de la ciudad y nos pareció muy bien comunicado. La limpieza del hotel era impecable y la cama era maravillosa. Pero lo que más nos gustó fue el trato personal y amable de todos los empleados, especialmente el de Elena. Sin duda, tuvimos una gran experiencia y recomendamos este hotel.

Imposible encontrar algo negativo. 😃👍

Concepto QBIC fabuloso y creativo. Personal sobresaliente. Ubicación cerca del metro y de todo. Buena onda y friendly. Decoración original y diferente. Cama grande y comodísima. Limpieza impecable. Comida del bar muy buena.

Mejor imposible.

Nos alojamos en un hotel muy cercano a una estación de metro, lo cual fue muy conveniente para nuestros desplazamientos por la ciudad. Además, la ubicación del hotel en el parque de enfrente le da un ambiente agradable y tranquilo.

Aunque las zonas comunes del hotel eran acogedoras y bien decoradas, nos resultó incómodo no tener una vista al exterior desde nuestra habitación.

La habitación era amplia y moderna, con grandes ventanas y una cama king size muy cómoda. El personal del hotel fue muy atento y eficiente, especialmente Jorge, quien hablaba español. La ubicación era excelente, a solo unos pasos del metro y cerca del centro de la ciudad. El desayuno era variado y de calidad.

No se me ocurre nada.