Este hotel es excepcional en todos los sentidos. Desde el momento en que llegamos, fuimos recibidos con un servicio impecable y amable. Las instalaciones son de lujo, con un lobby impresionante lleno de arte y elegancia. Las habitaciones son amplias y bien iluminadas, con pantallas inteligentes y una variedad de comodidades exclusivas. Además, el bar y el salón ofrecen una excelente selección de bebidas y aperitivos. La ubicación del hotel es ideal, con fácil acceso a numerosos lugares de interés y restaurantes de alta calidad.

La única pequeña cuestión que encontramos en este hotel fue la falta de variedad en el menú del restaurante. Si bien la comida era deliciosa, nos hubiera gustado ver más opciones disponibles para satisfacer diferentes gustos y dietas.

La decoración de la habitación y la comodidad de las camas y ropa de cama son excelentes. La ubicación del hotel es muy conveniente, cerca del World Trade Center y del metro. Además, se puede llegar al hotel en metro desde el aeropuerto. Hay buenos restaurantes cerca del hotel.

El desayuno buffet es muy simple y tiene poca variedad. No justifica el alto precio de $28 dólares, especialmente si quieres un omelette, que se cobra aparte.

Suite transformable en 1 o 2 ambientes. Conexión bluetooth/airplay con todos los equipos. Cómoda sala, baño y habitación principal. Amplia y cómoda habitación. Ubicación muy buena, cerca de buenos restaurantes. Cercanía al metro y al WTC. Magnífica habitación y baño. Decoración de la habitación y camas cómodas.

Nada, todo genial.

excelente ubicación cerca del One World Trade Center, OCULUS y 21 Century, habitación amplia y cómoda con decoración agradable, transporte público accesible desde el aeropuerto, hermosa vista al río desde el rooftop.

El hotel se encuentra en una zona maravillosa, cerca de todos los lugares de interés del centro de la ciudad. Además, está en el centro de la ciudad, lo que facilita el acceso a todo. La habitación es amplia y cómoda, con una vista preciosa al río y un living espacioso. El personal es amable y el servicio es excelente. El desayuno es variado y hay opciones para todos los gustos.

La ubicación en un barrio encantador y cercano al distrito financiero.

Nada de nada.

Otro aspecto que me gustó fueron las habitaciones. Eran grandes y cómodas, con un living incluido. Además, el hecho de que el wi-fi fuera gratis y que ofrecieran café de cortesía y agua mineral en la habitación fue un gran detalle que aprecié.

En cuanto a lo que no me gustó, cabe destacar que los tragos en el rooftop eran caros. Además, noté que quizás se necesitaba más personal que hablara español en recepción, ya que me imagino que puede resultar incómodo para personas mayores o que no hablen español con fluidez.

La ubicación es excelente, con fácil acceso y cerca del World Trade Center y del metro. Hay restaurantes cercanos y el barrio es tranquilo. La habitación tiene una decoración agradable y las camas son muy cómodas. El personal es muy amable y atento.

Me sentí verdaderamente mimado, no tengo ninguna queja.

Tuve una estadía excepcional en este hotel si te gusta Lower Manhattan. El diseño moderno y cosmopolita del Conrad hizo que me sintiera como en un apartamento, en lugar de un cuarto de hotel apretado. Los cuartos standards son amplios, con una sala con pantalla de TV y un pantry con cafetera Nespresso. La limpieza del hotel es excelente y el personal es muy amable. Además, el desayuno a la carta ofrece productos de primera calidad y orgánicos. La ubicación es ideal, con acceso al río para caminar o correr, y cercano a Brookfield Place y el maravilloso Westfield. Definitivamente recomiendo este hotel si quieres visitar Manhattan y sentirte como un neoyorquino.

El diseño elegante y la ubicación estratégica en el centro de la ciudad. A pocos pasos del World Trade Center y cerca de parques impresionantes como Rockefeller Park y Battery Park. Las habitaciones amplias y bien decoradas, con camas y blancos muy cómodos. El fácil acceso al transporte público desde el aeropuerto, utilizando las líneas A y E del metro.

El desayuno bufet era sencillo y tenía poca variedad. Además, consideré que no valía la pena pagar los 28 dólares, ya que te cobraban aparte por un omelette.

Excelente hotel en Lower Manhattan. Habitaciones amplias y muy bien equipadas, con iluminación inteligente y dos pantallas smart. El lobby es espectacular, con una decoración moderna y cómodos sillones. La ubicación es perfecta, frente al One World y el WTC, con un centro comercial justo al lado. El personal es muy amable y la limpieza es impecable. Recomiendo ampliamente este hotel.