Ubicación perfecta, cerca de Rodeo Drive y de varios restaurantes y tiendas. Habitaciones espléndidas y servicio excelente. Desayuno en la azotea y piscina muy bien. Restaurante y café-bar con música en directo.

Me sentí genial, no tengo ninguna queja.

Tuve una estancia increíble en Beverly Hills gracias a Maybourne. Estuve allí por una semana y pude disfrutar de todas las comodidades que ofrece este maravilloso hotel. La ubicación es perfecta, justo en el centro y cerca de Rodeo Drive, con una gran variedad de restaurantes y tiendas. Las habitaciones eran espléndidas y el servicio era excelente. El personal, especialmente Mónica, nos atendió de maravilla. Además, disfrutamos de un delicioso desayuno en la azotea junto a la piscina, así como de un restaurante y un café-bar con música en directo en la planta baja. Todo fue perfecto y sin duda volveremos en nuestra próxima visita a Beverly Hills. ¡Recomiendo Maybourne!

¡Lo recomiendo!

Uno de los mejores de Beverly Hills, ubicación perfecta en el centro cerca de Rodeo Drive, habitaciones espléndidas, excelente servicio, desayuno en la azotea y restaurante y café-bar con música en directo.

Todo fue como quería y necesitaba.

El personal del hotel era amable y atento durante todo mi viaje de negocios. Me ayudaron con todas mis necesidades y realmente se esforzaron por hacer mi estadía cómoda. La ubicación del hotel también fue perfecta, muy cerca de tiendas y restaurantes, lo que hizo que fuera conveniente cenar después de un largo día de trabajo. Además, las habitaciones estaban muy bien decoradas y tenían todas las comodidades que necesitaba para relajarme después de un día agotador.

Tuve algunos problemas con la conexión wifi durante mi estadía en este hotel. La señal era débil e inestable, lo que dificultaba mi capacidad para trabajar en línea.

Este hotel me proporcionó una experiencia lujosa y exclusiva. Desde el momento en que entré, el servicio fue impecable. Las habitaciones eran espléndidas, con comodidades exclusivas y una decoración elegante. El spa y centro de bienestar ofrecía una amplia gama de tratamientos de lujo, como masajes y tratamientos faciales. Además, la piscina cubierta y la sauna proporcionaban un ambiente relajante y tranquilo. Definitivamente, pude disfrutar de todas las comodidades de lujo que buscaba en este hotel.

La única pequeña queja que tuve fue que tuve que esperar un poco para ser atendido en el spa. Sin embargo, una vez que me atendieron, el personal era profesional y amable, y el tratamiento valió la pena la espera.

El hotel está excelentemente ubicado, en pleno centro de Beverly Hills, cerca de Rodeo Drive y sus tiendas y restaurantes. Las habitaciones son espléndidas, con un excelente servicio. Se destaca la atención de Mónica, quien nos atendió de maravilla. En la azotea del hotel se puede disfrutar de un delicioso desayuno junto a la piscina. Además, cuenta con un restaurante y un café-bar con música en directo.

Aunque todo fue de primera calidad, hubo un pequeño problema con el televisor que fue solucionado rápidamente.

La comida fue excelente, todas nuestras comidas fueron de primera calidad, con una presentación delicada y un buen gusto en cada detalle. Además, la ubicación del hotel es perfecta, cerca de todo en Beverly Hills, lo cual facilitó nuestro movimiento por la ciudad. El servicio también fue destacable, desde el personal de valet hasta el personal del restaurante, quienes nos atendieron de maravilla. También tuvimos la oportunidad de disfrutar de un delicioso desayuno en la azotea del hotel, al lado de la piscina, lo cual fue una experiencia encantadora.

Todo estuvo perfecto.