Mi estancia en el Hotel Floris Arlequin Grand-Place fue simplemente excepcional. La habitación estaba equipada con todas las comodidades que necesitaba, desde un refrigerador y una máquina de café hasta una amplia y lujosa baño con cómodos albornoces. Además, la vista desde el restaurante en el séptimo piso, "7th Heaven", durante el desayuno continental era espectacular, con una vista impresionante de la ciudad.

A pesar de todo, el acceso al hotel puede ser un poco complicado, ya que se encuentra en una calle pequeña con varias tiendas de comida para llevar y puede ser un poco oscuro por la noche. Sin embargo, esto no fue un problema significativo en comparación con todas las comodidades y la ubicación conveniente que ofrece el hotel.

Mi estancia en el Hotel Floris fue fantástica. La ubicación es perfecta, a solo dos calles de la Grand Place y rodeado de muchos lugares para comer y disfrutar. La habitación que me asignaron era bastante pequeña, pero estaba limpia y tenía un baño reformado. Lo mejor fue el desayuno en la terraza del séptimo piso, con unas vistas espectaculares de la ciudad. El personal fue muy amable y servicial en todo momento. En general, recomendaría este hotel sin dudarlo.

Excelente ubicación céntrica cerca de Grand Place y sitios turísticos. Desayuno en el último piso con vistas a las azoteas y torres. Habitaciones amplias y cómodas, baño grande con bañera y ducha. Personal atento y amable, hablan varios idiomas. Buena variedad en el desayuno.

Este hotel está muy bien ubicado en el centro de la ciudad vieja, cerca de la Grand Place. Además, el precio es bastante accesible para lo que ofrece. me gustó que el desayuno tuviera variedad de opciones, como cereales, huevos revueltos y tocino. Por último, el personal fue amable y atento durante mi estancia.

Todo estuvo bien, no hay aspectos negativos que mencionar.

El lobby del hotel es acogedor y la recepción fue muy atenta. La habitación es amplia, con vistas impresionantes.El baño está muy bonito y limpio.El desayuno continental en la terraza fue una experiencia encantadora.La ubicación del hotel es perfecta, a solo 1 minuto de la Grand Place.

Me sentí realmente atendido, no tengo ninguna queja en absoluto.

El hotel está muy bien ubicado en el centro de la ciudad vieja de Bruselas, lo que facilita recorrer los lugares turísticos a pie. Las habitaciones, aunque parecen un poco antiguas, están limpias y bien amuebladas. El desayuno continental es increíble, ofreciendo una amplia variedad de opciones de comida y bebida. El personal es amable y servicial, lo cual hizo que nuestra estancia fuera muy agradable.

Todo estuvo bien.

Me hospedé en el Hotel Floris Arlequin Grand-Place de Bruselas solo por tránsito durante mi viaje, y me encantó la conveniencia de su ubicación, con la estación central y la estación sur que me llevaron a todas las principales ciudades belgas y europeas. Además, el aeropuerto de Zaventem está a solo 20 km de distancia, lo que hizo que mi salida fuera muy práctica.

Experimenté un inconveniente menor durante mi estancia. Al llegar, nos asignaron una habitación que daba a la calle, y por la noche era difícil dormir debido al ruido proveniente de un bar cercano, con gritos y peleas.

Ubicación céntrica y tranquila, cerca de la Grand Place. Habitación amplia y confortable con camas dobles. Desayuno completo con hermosas vistas. Personal atento y amable. ¡Volveremos!

Nos encantó la ubicación céntrica de este hotel, muy cerca de la estación de trenes y convenientemente ubicado en el centro histórico de la ciudad. Además, está en una zona peatonal, lo cual lo hace aún más agradable. disfrutamos de un desayuno muy completo y del personal amable y servicial.

Todo está bien.

El hotel tiene una ubicación ideal en el centro de la ciudad, muy cerca de la gran plaza y de la estación central. Según los comentarios, las habitaciones son amplias y la limpieza es bastante buena. Además, el desayuno es completo y el personal es amable y servicial.

Hubo algunas quejas sobre el estado general del hotel, mencionando que le falta un poco de mantenimiento y que hay problemas con la calefacción y la presión del agua en las duchas.

La ubicación de este hotel es excelente, justo en el centro de la ciudad vieja. Está a solo unos minutos a pie de la Gran Plaza y de la estación central. Además, hay muchos restaurantes y tiendas en los alrededores.

Todo estuvo bien, ninguna queja.

nuestra estancia en Bruselas fue aún mejor gracias a nuestra experiencia en un hotel muy cercano a la Grand Place. La ubicación era excelente, con paradas de metro, restaurantes y la oficina de turismo a solo unos minutos. Además, el personal fue amable y servicial, y la habitación y el baño estaban bien equipados y cómodos. Definitivamente volveremos a alojarnos aquí en nuestro próximo viaje.

la moqueta de la habitación necesitaba mantenimiento.

Este hotel ofrece una excelente relación calidad-precio, con precios asequibles para alojarse en pleno centro de la ciudad vieja. Además, el personal es amable y atento, asegurándose de que la estancia sea agradable. Las habitaciones son cómodas, con preciosas vistas desde los pisos inferiores y algunas incluso cuentan con instalaciones para hacer té. Sin duda, el desayuno es uno de los puntos destacados, ya que se sirve en el último piso con una maravillosa vista a la Grand Place.

Todo estuvo perfecto, no hay nada que mejorar.

El desayuno buffet excelente. Organización y productos profesionales.Vistas inolvidables a la Grand Place.Habitación amplia y sin ruidos.

Para nosotros fue ideal.

El personal fue muy amable y servicial en todo momento. La ubicación fue perfecta, ya que estaba cerca de muchos restaurantes y bares, así como del transporte público. La habitación estaba muy limpia y las instalaciones del hotel eran excelentes. Además, el desayuno fue muy completo y delicioso.

De verdad no hay nada que no me haya gustado. El hotel superó todas mis expectativas y no tengo ninguna queja.