Experiencia única y auténtica. Habitaciones tradicionales japonesas.Comida vegetariana de calidad.Actividades como meditación y ceremonias religiosas.Ubicación perfecta en el centro de Kōyasan.

Nada que mencionar.

La estancia en este hotel fue una experiencia realmente inolvidable. En primer lugar, quedé impresionado por el valor que ofrece este lugar. En comparación con otros lugares en los que me he alojado en Japón, el precio de este hotel es muy razonable y justificado por la calidad y la atención al detalle que ofrecen. Además, la ubicación en medio del bosque de montaña es simplemente espectacular. Las vistas desde las habitaciones son increíbles y realmente te sumergen en la tranquilidad del entorno natural. debo mencionar el excelente servicio que recibí de todo el personal del hotel. Son amables, atentos y están dispuestos a hacer todo lo posible para que tu estancia sea lo más cómoda posible. Por último, la comida servida en este hotel es una delicia. Me encantó el desayuno con su cocina vegetariana tradicional. Los platos eran sabrosos y satisfactorios, lo que realmente me permitió disfrutar de una auténtica experiencia japonesa.

Todo fue perfecto.

Ubicación y ambiente ideales. Cena y desayuno vegetarianos. Actividades interesantes para turistas. Habitaciones cómodas y limpias. Excursión nocturna al cementerio recomendable. Ceremonias en inglés.

Nada en absoluto de lo que quejarse.

Me alojé en este templo durante mi visita a Koyasan y quedé impresionado por su ubicación ideal cerca de una parada de autobús y de todos los lugares de interés principales. La habitación estaba limpia y cómoda, con un hermoso tatami. Los monjes fueron muy serviciales y amables. Además, el desayuno y la cena vegetarianos eran deliciosos, con una amplia variedad de platos tradicionales.

La experiencia de alojarme en un monasterio budista fue fantástica. Los monjes son muy amables y las habitaciones son preciosas. Participar en las oraciones y ceremonias del fuego con los monjes y meditar en grupo fue un experiencia maravillosa. Los templos y monasterios alrededor de la zona son impresionantes. Recomiendo el Tour Nocturno por el cementerio de Ekoin, es realmente único. Además, las instalaciones del monasterio son preciosas y el cuarto de baño es todo un lujo.

Me sentí súper cómodo, no me puedo quejar.

La ubicación de este hotel en el bosque de las montañas te sumerge en un entorno tranquilo y sereno. Las habitaciones son encantadoras, especialmente aquellas con una bonita vista desde las ventanas. Además, el baño privado añade comodidad a la estancia.

Todo estuvo perfecto.

Espectacular ubicación y comida deliciosa: disfruté de una ubicación privilegiada en pleno centro de una hermosa aldea japonesa. Además, la comida incluida en el servicio de media pensión fue deliciosa y bien elaborada.

Además, la habitación en la que me hospedé era bastante incómoda y carecía de comodidades básicas.

La experiencia de alojarse en un templo budista fue única y realmente interesante. La ubicación del hotel era ideal, cerca del cementerio y de otros lugares de interés en Koyasan.- Disfruté mucho de la tranquilidad y paz que se respiraba en el lugar.

El frío en las habitaciones fue un problema, especialmente en una zona tan fría como Koyasan. Los baños compartidos sin separación fueron incómodos.

Las mejores cosas fueron la limpieza impecable, las instalaciones del hotel, el excelente desayuno y el personal amable. destacamos la ubicación del hotel, junto a las montañas y cerca de todos los principales lugares de interés turístico de esta ciudad. Fue muy conveniente tener un restaurante al lado del hotel para poder disfrutar de una buena comida sin tener que desplazarnos lejos.

Nada podría haber sido mejor.

El Eko-in es un remanso de paz con baños compartidos muy limpios y habitaciones amplias. Te proporcionan una estufa y una mesa camilla con brasero para mantenerte caliente durante el invierno. El desayuno y la cena son deliciosos y te preparan los futones para la noche. La excursión al cementerio de noche es impresionante.

Me sentí muy a gusto, no tengo ninguna queja en absoluto.

el shukubo fue una experiencia increíble en Koyasan. La ceremonia del fuego y los jardines otoñales fueron lo más destacado. La habitación con baño privado fue muy cómoda y la visita nocturna al cementerio fue fascinante.

el precio era elevado para un alojamiento con baño compartido.

Buena ubicación junto parada de autobús. Personal amable y servicial. Actividades extra disponibles. Cena y desayuno deliciosos y en abundancia. Camas sorprendentemente cómodas y baño comunitario caliente. Experiencia inolvidable.

el alojamiento superó mis expectativas. El personal fue amable y atento, las comidas deliciosas y personalizadas, la habitación cómoda y el ambiente tranquilo. Disfruté mucho de las actividades ofrecidas y de la experiencia de estar en un templo budista.

falta información sobre las actividades y horarios

Al llegar, los futones ya estaban preparados y el personal fue rápidamente atento a nuestras necesidades. Disfrutamos de la ceremonia budista y del fuego. La comida tradicional en la habitación fue deliciosa. Los jardines con colores otoñales eran preciosos.

meditar y presenciar rituales budistas, habitaciones estilo japonés tradicional, comida vegetariana deliciosa, excursión nocturna al cementerio, ubicación perfecta en Kōyasan.

desayuno y cena repugnantes.