¡Increíble! Qué experiencia tan alucinante desde el momento en que llegamos al hotel. El personal fue súper amable y atento, siempre dispuesto a ayudarnos en todo. La habitación era muy espaciosa y estaba impecablemente limpia. La decoración del hotel y del restaurante era simplemente impresionante. Nos encantó la nueva zona construida, que estaba conectada al edificio principal y tenía varios ambientes diferentes. Las zonas comunes eran preciosas y nos sorprendió gratamente encontrar un gimnasio y el bar Ozzo, donde disfrutamos de deliciosas bebidas. Además, el desayuno era algo fuera de este mundo. Había una amplia variedad de opciones y una panadería que ofrecía panes recién horneados. No podemos olvidar mencionar que el hotel nos regalaba café por las mañanas. En general, fue una estancia perfecta para nosotros como pareja.

Me gustó mucho el hecho de que regalaban café por las mañanas y que los recepcionistas siempre estaban sonrientes. Además, la distribución y el tamaño de la habitación eran muy buenos. La ubicación del hotel también era conveniente, ya que estaba bien comunicado por autobús.

Hubo algunas cosas que no me gustaron. Por un lado, la entrada al establecimiento era un poco complicada y no estaba muy bien señalizada.

En resumen, disfrutamos de algunas comodidades y servicios ofrecidos en este hotel durante nuestra estancia en navidad, pero también encontramos algunas áreas de mejora en cuanto a las habitaciones y señalización.

Hubo algunos aspectos negativos durante nuestra estancia. Las habitaciones parecían un poco anticuadas y se escuchaba mucho ruido, especialmente proveniente de la autopista cercana.

La atención y amabilidad del personal, completísima habitación y aseo, decoración del hotel y restaurante, ideal para una estancia en pareja, zonas comunes preciosas.

Todo fue perfecto.

Instalaciones modernas y espaciosas en la zona nueva. Desayuno impresionante con panadería propia. Atención amable y sonriente del personal. Buen tamaño y distribución de las habitaciones.

Nos alojamos en Van Der Valk Hotel y tuvimos una experiencia maravillosa. Las mañanas fueron aún más agradables con el café gratuito que regalaban y los recepcionistas siempre nos recibieron con una sonrisa. También quedamos encantados con la distribución y el tamaño de la habitación, que eran muy buenos. El personal fue amable y atento, y la habitación estaba completa y bien cuidada. Además, la decoración del hotel y del restaurante era encantadora, lo que lo hacía ideal para una estancia en pareja. Las zonas comunes también eran bonitas y acogedoras.

Mejor imposible 😊 Las habitaciones eran un poco viejas y bastante ruidosas debido a la autopista cercana, lo cual era un inconveniente. Sin embargo, esto no afectó nuestra experiencia en el desayuno, que fue impresionante.

La ubicación del hotel es excelente, ya que está en el centro de la ciudad y cerca de la parada de autobús. Además, las habitaciones son amplias y cómodas, con un servicio atento y un delicioso desayuno incluido. cuenta con instalaciones como una piscina y un gimnasio bien equipado.

El restaurante del hotel deja mucho que desear, ya que la comida es cara y de mala calidad.

La limpieza impecable, las fantásticas instalaciones del hotel, la conveniente ubicación cercana al centro de la ciudad y a la parada de autobús, y el personal amable y atento.

Nada, es perfecto.

Las zonas comunes son preciosas, el desayuno es impresionante con panadería y café por la mañana. Sonrientes recepcionistas y amplias habitaciones. 👍