Casa de pueblo reconstruida y decorada con mucho encanto. Distribución peculiar pero no supuso un problema. Propietario amable y discreto, con buenas recomendaciones gastronómicas. Desayunos abundantes y deliciosos. Camas cómodas y silencio para dormir bien. Terracita del primer piso muy agradable. La casa tiene de todo para pasar unos días. Detalles como las mecedoras y el alcohol de romero. Experiencia estupenda, nos encantaría repetir y recomendamos totalmente la casa y el pueblo.

Me sentí como si estuviera en casa, no me puedo quejar.

En Ca'Ls Avis hemos disfrutado de una estancia maravillosa en un encantador pueblo. Desde aquí, hemos realizado algunas rutas senderistas sin necesidad de utilizar el coche. Además, la oferta gastronómica es variada, y recomendamos especialmente el bar del polideportivo. Nos hemos sentido muy bien en este pueblo, donde la gente es amable y acogedora. La casa es preciosa, con una decoración encantadora y el propietario, Arturo, ha sido un excelente anfitrión. Nos ha proporcionado información útil e incluso nos ha acompañado a un lugar con unas vistas espectaculares. Los desayunos han sido deliciosos y se han adaptado a nuestros gustos cada día. Recomendamos totalmente este establecimiento y este pueblo que nos ha encantado.

El alojamiento se encuentra en un encantador pueblo de montaña, ideal para aquellos que buscan paz y contacto con la naturaleza. Las habitaciones están decoradas con gusto y ofrecen camas cómodas para un descanso placentero. Además, el anfitrión es amable y servicial, brindando un excelente servicio. Destacan los desayunos, caseros y deliciosos, que se pueden disfrutar en el acogedor comedor.

La falta de estacionamiento puede resultar complicada para aquellos que viajan en coche.

Me gustó mucho la ubicación de este lugar, ya que estaba en un pequeño pueblo encantador. Pudimos hacer algunas rutas de senderismo sin tener que desplazarnos en coche, lo cual fue genial. Además, la oferta de restaurantes en el pueblo era muy variada y encontramos algunos lugares deliciosos para comer. Por otro lado, el propietario fue muy amable y atento, nos dio información sobre lugares para visitar y nos acompañó a un paraje con vistas espectaculares. disfrutamos mucho de los desayunos, siempre acoplándose a nuestros gustos y variando cada día.

Encontré que el aparcamiento en el pueblo era un poco complicado, ya que había muchas cuestas y calles estrechas. noté que las camas de matrimonio en la casa eran un poco pequeñas, aunque eran cómodas.