Me encantó la estancia en este lugar. Lo mejor fue el trato amable y servicial del personal, siempre dispuestos a ayudar en todo. Además, las instalaciones estaban en perfectas condiciones, con un clima muy agradable. También disfruté de la belleza del entorno y las vistas panorámicas que se ofrecían. La ubicación era ideal para desconectar del bullicio de la ciudad y relajarse en plena naturaleza.

Por otro lado, hubo algunos aspectos que no me gustaron tanto. En primer lugar, hubo un pequeño problema de comunicación entre la reserva y el establecimiento, lo que causó ciertos contratiempos al llegar.

Recomendaría a todos este lugar, ya sea para una escapada romántica o para unas vacaciones en familia. La casa era encantadora, con techos de madera y todos los servicios necesarios. El personal era amable y acogedor, te hacían sentir como en casa. Sin duda, volveré a Casonas de Marengo cuando regrese a Tenerife.

Un jardín impresionante, decoración adorable y terraza con vistas. Tuve que dependeer de un coche, ¡qué original! Ni hablar de la piscina fría. Ha sido una experiencia inolvidable.

Me encanta encontrarme con telas de araña y salsa de tomate de los anteriores huéspedes. Fascinante.

Si estás buscando un alojamiento tranquilo y relajante para tu visita a Tenerife, este lugar es perfecto. Las vistas espectaculares te dejarán sin aliento: el majestuoso Teide y el hermoso mar. Además, el entorno natural te hará sentir en paz y en armonía con la naturaleza. Las instalaciones son acogedoras y cómodas, y la atención de María Luisa es excepcional. Sin duda, un lugar ideal para escapar del bullicio y disfrutar de la belleza de la isla.

El acceso a la finca puede resultar complicado debido a las empinadas calles que conducen a ella.

Mi estancia en Casonas de Marengo fue simplemente maravillosa. Fui en busca de paz y tranquilidad, y definitivamente la encontré. El lugar es espectacular para descansar y relajarse, y dormí de maravilla. Las vistas desde la terraza de la casa "La cuadra" son simplemente espectaculares, con vistas al Teide y al mar tal como se ven en las fotos. Además, todo el personal fue amable y servicial, siempre con una sonrisa y dispuestos a ayudar en todo momento. Destaco especialmente a Noelia, quien estuvo pendiente de nosotros desde el primer día, trayéndonos detalles prácticamente a diario. Las instalaciones están en perfectas condiciones y el clima es muy agradable. disfrutamos del entorno natural, ubicado a los pies del Teide. El estudio en el que nos alojamos era muy acogedor y estaba bien equipado. Los servicios ofrecidos, como la piscina, las zonas de barbacoa, el parque infantil y el aparcamiento privado, hacían que la estancia fuera muy cómoda y atractiva. Sin duda, una experiencia increíble.

Lo recomiendo.

Nuestra estancia en Casonas de Marengo fue fantástica. La casita en la que nos alojamos era preciosa, con techos de madera y una decoración encantadora. Disfrutamos de unas vistas espectaculares al Teide, lo cual fue simplemente impresionante. Además, la casita estaba bien equipada con una cocina completa, incluyendo tostadora y cafetera, lo cual nos permitió preparar nuestros propios desayunos y comidas. La piscina era perfecta para refrescarnos y los niños se divirtieron mucho en ella. El personal fue amable y nos hizo sentir bienvenidos durante toda nuestra estancia. Sin duda, recomendaría Casonas de Marengo tanto para una escapada romántica como para unas vacaciones en familia.

Uno de los inconvenientes fue que el mando para abrir la puerta de la entrada de la finca fallaba ocasionalmente, lo cual resultaba un poco incómodo. Además, hay una cuesta empinada para llegar al alojamiento, lo cual puede dificultar el acceso a personas con movilidad reducida.