Edificio histórico con personal amable y atento. Habitación amplia y cómoda, desayuno abundante con productos locales. En un bonito pueblo.

Me alojé en Torija antes y el Hotel Rural El Salero superó mis expectativas esta vez. El desayuno fue delicioso y la anfitriona, Pilar, tuvo un detalle especial por el cumpleaños de mi pareja. La casa es preciosa y llena de historia, con muchos detalles especiales que la hacen única.

Ruido constante de los coches.

que experiencia tan maravillosa en torija! rural el salero supero nuestras expectativas en esta parada rápida. el edificio antiguo y encantador, el desayuno delicioso y el personal increíblemente atento. definitivamente volveremos!

ruido de la carretera

Me encantó mi escapada romántica en este hotel rural en Torija. Los aspectos que más me gustaron fueron la calidez del personal y la excelente atención recibida. Además, la ubicación del hotel era perfecta, cerca de la autovía, lo cual facilitó nuestro viaje. disfrutamos de la deliciosa comida que nos ofrecieron en el restaurante, especialmente de los platos elaborados con cariño. Sin duda, fue una experiencia maravillosa que repetiríamos sin pensarlo dos veces. ¡Altamente recomendado!

El trato del personal fue extraordinario, siempre atentos y amables. Nos dieron recomendaciones sobre qué visitar en los alrededores y dónde comprar productos típicos de la zona. Además, la estética del lugar es realmente excepcional, con una rehabilitación impecable que dejó un lugar exquisito. También destacaría la limpieza y los detalles cuidados del hotel. Por último, la comida fue una verdadera maravilla, con platos deliciosos y auténticos caldos de la zona que nos encantaron.

El Salero en Torija superó nuestras expectativas una vez más. La tranquilidad del lugar y la amabilidad de Pilar y Paco nos hicieron sentir como en casa. La habitación "Las viñas" era amplia y bonita, el desayuno casero fue completo y delicioso. ¡Esperamos volver pronto!

Falta poder desayunar en el salón con nuestras mascotas.

Me encantó la sorpresa de encontrar un lugar tan singular y acogedor en mi viaje por la carretera A2. El personal fue amable y el servicio excelente, además la comida fue increíble, platos caseros deliciosos y bien preparados. disfruté de la historia del lugar que nos contaron los dueños. Además, la ubicación era ideal, ya que estaba cerca de la autopista y era fácil llegar. Sin duda, uno de los mejores aspectos fue el desayuno, que era completo y delicioso, incluso mejor que en muchos hoteles de 4 estrellas.

Por otro lado, hubo algunos aspectos que no me gustaron tanto. La ubicación del pueblo era un poco peligrosa, especialmente el acceso desde el hotel, ya que había que cruzar una carretera sin visibilidad en algunas zonas.