Nos encantó alojarnos aquí. El hotel está ubicado en las montañas, en el casco antiguo del pueblo. Desde allí se puede disfrutar de unas maravillosas vistas panorámicas a la montaña. La habitación en la que nos alojamos era sencilla pero cómoda y estaba impecablemente limpia. Además, el servicio fue excelente, el personal fue muy amable y cordial durante nuestra estancia. El desayuno que nos ofrecieron fue magnífico y encontramos paz y relajación en este lugar apartado.

El acceso en coche hasta el hotel puede ser complicado debido a las calles estrechas del pueblo.

Una estancia muy agradable. Amabilidad de la anfitriona. Habitación confortable. Vistas bonitas. Recomendaciones de excursiones y restaurantes interesantes. Uso de nevera facilitó la estancia. Atención acogedora y cercana de Pilar y su madre. Alojamiento confortable y limpio. Buenos desayunos y cenas.

No había nada que no me gustara.

Justo lo que estábamos buscando, una casa rural con encanto donde puedes alojarte por habitaciones. En un pueblo tranquilo con pequeñas callecitas. Habitación muy espaciosa, con una cama grande y cómoda. Disponíamos de una terraza donde nuestro bebé pudo jugar frente a las preciosas vistas a la montaña. El trato recibido por parte de Pilar y su madre fue fenomenal, muy atentas en todo momento. Las comidas fueron exquisitas, con platos caseros y ingredientes de calidad. Además, cuentan con garaje para el coche. Recomendaría este lugar.

Recomendaría a todos este lugar.

La experiencia en L'Era de Cal Bastida fue espectacular. Nos quedamos sin palabras al ver la ubicación idílica del lugar y el trato tan familiar de Pilar. Las vistas desde la terraza de la casa eran impresionantes y la habitación era cómoda y acogedora. Además, el embutido del desayuno estaba delicioso. Sin duda alguna, recomendaría este hotel.

Aunque el acceso al establecimiento en coches grandes puede ser un poco complicado, con paciencia y yendo poco a poco se puede lograr. También se escuchaba hablar a las habitaciones contiguas si hablaban en tono alto.

estancia perfecta, Pilar siempre atenta y amable, recomienda lugares increíbles y facilita la estancia. Tranquilidad absoluta.

Ruidos molestos de otras personas.

La ubicación de este alojamiento es excepcional, situado en la cima de una colina, ofrece unas vistas impresionantes de las montañas circundantes. Además, el casco antiguo del pueblo se encuentra a pocos pasos, lo que permite disfrutar de su encanto histórico. La habitación estaba perfectamente limpia y acogedora, y el baño contaba con todas las comodidades necesarias. destacaría la amabilidad del personal, que nos brindó un servicio excelente durante toda nuestra estancia.

El acceso al establecimiento puede resultar complicado para vehículos grandes, pero con paciencia y conduciendo con cuidado, no hay ningún problema.

La limpieza del hotel es impecable y las habitaciones son acogedoras y confortables. Además, el personal es muy amable y siempre dispuesto a ayudar. El desayuno es delicioso, con una gran variedad de opciones. También hay un parking gratuito disponible en el hotel, lo cual es muy conveniente. La ubicación en las montañas ofrece vistas impresionantes y mucha tranquilidad, perfecto para descansar.

Nada negativo.

Me gustó la ubicación tranquila del hotel y poder aparcar sin ningún coste. La habitación era cómoda y la cama era grande y confortable. También aprecié que nos proporcionaran toallas y gel de baño. Además, las vistas desde la habitación eran impresionantes.

No esperaba calles tan estrechas en el pueblo, lo cual dificultó la circulación con nuestro coche grande en algunas ocasiones. También fue complicado encontrar la entrada al hotel, ya que era de noche y Google Maps no era de mucha ayuda.

Nuestra experiencia en este alojamiento en la cima de una colina fue maravillosa. Las habitaciones estaban limpias y espaciosas, con vistas impresionantes a las montañas. Además, el trato del personal fue excelente, nos hicieron sentir como en casa. Por otra parte, el desayuno fue delicioso, con productos caseros que nos encantaron.

Nos hubiera gustado que el gel de ducha estuviera disponible en el baño.

Lo que menos me gustó fue el tamaño de la habitación y del baño. Eran bastante pequeños y bastante básicos en cuanto a su decoración y comodidades. Además, contraté una habitación superior pero no pude disfrutar de la terraza en su totalidad, ya que no era adecuada para dormir durante la noche.

Las habitaciones eran acogedoras, limpias y con vistas bonitas desde la terraza. Las camas eran cómodas y se arreglaban a diario. Destacamos la amabilidad y atención de la dueña Pilar. El lugar es muy recomendable para unas vacaciones en familia.

No pude encontrar ningún fallo.

Mi estancia en la Era de Cal Bastida fue simplemente maravillosa. El entorno natural en plena montaña era impresionante y me sentí como si estuviera en un cuento de hadas. La atención de Pilar y su madre fue excepcional, siempre amables y dispuestas a ayudar.

Nos encantó la ubicación de este alojamiento. Está situado en el casco antiguo, lo que le da un encanto especial. Además, está rodeado de montañas, lo que ofrece unas vistas impresionantes. La habitación era cómoda y espaciosa, con un baño amplio y bien equipado. El servicio fue excelente, Pilar nos hizo sentir como en casa desde el primer momento. El desayuno fue delicioso, con una variedad de opciones. Sin duda, la estancia en este lugar fue un verdadero placer.

El acceso al wifi solo estaba disponible en las zonas comunes y no llegaba a la habitación.

Nos encantó la estancia en este lugar perdido en medio de la montaña. Perfecto para relajarse y desconectar. Las vistas son espectaculares y las habitaciones estaban limpias y amplias. El desayuno era completo y delicioso. El personal, especialmente Pilar, fue amable y atento. Además, había parking techado disponible.

La atención del personal fue excelente, proporcionando un ambiente acogedor. Las vistas y el silencio del lugar son premiados. El alojamiento es limpio y confortable. Los desayunos y las cenas son muy buenos.