Las instalaciones espectaculares, huerto, paseo por el recinto, ubicación perfecta, personal encantador, acceso a las habitaciones.

No hubo nada que no me gustase.

¡Resultó ser el mejor lugar para perderse! Si buscas desconectar del día a día, La Hospedería Del Silencio es la mejor opción. El personal es encantador, las habitaciones son de fácil acceso y ofrecen mucha intimidad, además de tener unas vistas preciosas. Sin duda, repetiría. Los menús de comida son vegetarianos, muy variados y deliciosos. Hay que avisar con antelación si vas a comer o cenar allí. Miman mucho el trato con los huéspedes, haciéndote sentir como en tu casa. ¡Muchísimas gracias por todo!

De verdad que lo recomiendo!

Superó nuestras expectativas. Fuimos en familia, todo adultos. Cogimos 2 bungalows, uno grande y otro pequeño y nos los dieron juntos como solicitamos, lo que fue muy cómodo. Es verdad que el grande es más cómodo, tiene ese balcón en la parte trasera donde cenamos y desayunamos, que puede mejorar mucho la experiencia. Todo muy limpio. También nos gustó que no estuviera masificado y eso que el fin de semana que fuimos estaba completo pero ni se notó. En la piscina nos llegamos a bañar solos. Desde ahí hicimos varias rutas caminando, con unas vistas increíbles. No hay wifi ni TV, pero no lo echamos nada de menos. Pasamos un rato agradable en familia y repetiremos! Mención especial a la mujer que te recibe pues es un encanto!

Lo que más me gustó de estos unos días en el alojamiento fue la amabilidad del personal y los excelentes servicios ofrecidos. No me faltó nada y me sorprendió mucho lo bien atendido que me sentí en todo momento. Además, el entorno natural de los alrededores era fantástico, lo cual añadió aún más encanto a mi estancia. Sin duda, disfruté de una experiencia tranquila y recuperadora.

En cuanto a los aspectos negativos, hubo algunas cosas que no me gustaron tanto. La limpieza fue un poco mediocre, encontré telarañas en la mesa y algunas manchas en la tapa del WC. Además, el menaje de cocina era escaso y la iluminación un poco escasa en algunas zonas.

Ubicación en un bello entorno en medio del campo con vistas a las montañas. El alojamiento es espacioso y está bien equipado con cocina, baño y habitación con vistas a la montaña. Limpieza adecuada en el lugar. Amplios espacios exteriores y bonitos para pasear por el campo. Piscina grande y limpia con vistas a la montaña. Personal amable y respetuoso.

No: No hay aspectos negativos mencionados.

La amabilidad del personal fue excelente y me sentí muy bien atendida en todo momento. El entorno natural de los alrededores era fantástico y me permitió desconectar del día a día. Las habitaciones tenían un acceso muy bueno, mucha intimidad y unas vistas preciosas. Además, los menús de comida eran vegetarianos, variados y deliciosos.

Nada, todo fue genial.

Mis mejores aspectos de este lugar fueron la ubicación en un bello entorno, la limpieza impecable, las instalaciones del hotel, y el amable personal. Además, pude estacionar fácilmente mi vehículo y encontré el desayuno delicioso.

la estancia en robledillo de la vera en la hospedería del silencio superó nuestras expectativas. el lugar es tranquilo y perfecto para descansar. el alojamiento estaba limpio y tenía todo lo necesario, aunque le faltaba una terraza. destacamos la piscina y las vistas desde el alojamiento. volveremos seguro.

Faltó limpieza y encontramos un nido de moscas en la planta superior. sería necesario revisar antes de la llegada de los huéspedes.

La amabilidad del personal, servicios excelentes, estupendas vistas, camas cómodas, entorno natural fantástico, ideal para ir con niños.

Me sentí como si fuera mi propia casa, no tengo ninguna queja en absoluto.

Disfrutamos de un lugar excepcional, rodeados de naturaleza y paz. El personal fue amable y el alojamiento espacioso, con vistas a las montañas. La limpieza del hotel fue adecuada y las instalaciones, como la piscina y los paseos por la finca, estaban muy bien cuidadas.

No.

La tranquilidad y el silencio del hotel fue lo que más disfruté durante mi estancia. También me encantaron las vistas impresionantes que se podían disfrutar desde cada rincón del lugar. El personal fue muy amable y me hizo sentir como en casa. La limpieza de las habitaciones y las instalaciones del hotel estaban impecables. Además, el desayuno fue delicioso y ofrecía opciones saludables para todos los gustos.

Todo fue maravilloso.