La ubicación es perfecta, justo en el centro pero tranquila. Las vistas a la catedral desde la habitación son simplemente impresionantes. Además, el desayuno tiene una variedad espectacular y las chicas en recepción son súper amables.

No dudaría en recomendar este hotel 😊❤️

maravillosa experiencia en burgos, con vistas a la catedral y un desayuno que hace sonreír, un lugar para recordar siempre

Excelente ubicación, camas cómodas, desayuno variado.

Ubicación excelente, pero el wi-fi es lento y no hay ascensor para las maletas.

La ubicación es inmejorable, justo enfrente de la catedral. Las vistas desde la habitación son preciosas, aunque no todas las habitaciones tienen la misma perspectiva. El personal, amable y atento, nos hizo sentir bienvenidos. Sin embargo, la climatización era un problema; hacía excesivo calor y las almohadas muy gruesas resultaron incómodas. La limpieza dejó algo que desear, y los detalles como ventanas rotas no pasan desapercibidos. El desayuno podría ofrecer más variedad. A pesar de estos inconvenientes, el encanto del lugar compensa bastante.

Excepcionales vistas y atención amable

Las impresionantes vistas a la catedral de Burgos desde la habitación fueron un verdadero deleite, especialmente al atardecer. La atención del personal fue destacable, siempre amables. El desayuno también resultó muy agradable, en un salón donde podías disfrutar de las maravillosas vistas mientras tomabas tu café.

La habitación era maravillosa, con vistas a la catedral. El tamaño fue adecuado y el mobiliario de estilo clásico aportó encanto al ambiente. La cama era cómoda, favoreciendo un buen descanso después de explorar la ciudad. La temperatura controlada fue efectiva, permitiendo un ambiente agradable durante nuestra estancia. El único inconveniente fue el estado de algunos grifos en el baño; estaban rotos y carecían de embellecedores. Aunque nos ofrecieron una habitación superior, la falta de atención al detalle en el mantenimiento fue notable. Sin embargo, el buen desayuno y la amabilidad del personal hicieron que la experiencia fuera positiva.

Las vistas a la catedral son espectaculares, aunque el ruido del grifo era molesto.

La ubicación es perfecta, justo enfrente de la catedral, y el desayuno es increíble, hay de todo para empezar el día. El personal es muy amable, especialmente una chica que nos atendió en el desayuno y se acordó de nuestras preferencias.

No fue barato, pero la calidad lo vale.

Impresionantes vistas y cerca de toda la acción en Burgos

El hotel tiene una ubicación excelente justo enfrente de la catedral y en pleno centro de la ciudad, lo que me permitió disfrutar de un paseo por el casco antiguo donde encontré muchos puntos de interés como la Escalera Dorada y la Iglesia de San Esteban, todo a menos de 5 minutos a pie. Además, la habitación era espaciosa y luminosa, con vistas espectaculares a la catedral, especialmente hermosas por la noche. El desayuno era un buffet bastante aceptable. Pero las instalaciones del hotel son un poco anticuadas, y el aire acondicionado no funcionaba en todo el edificio, lo que afectó la comodidad de nuestra estancia.

Una opción inmejorable para una escapada de fin de semana en Burgo con una fantástica relación calidad-precio. Ubicación perfecta, al lado de la catedral.

Ubicació excel·lent, vistes a la catedral. Habitacions netes, decoració encantadora. Més tranquil·les del que esperàvem. Molt amables a la recepció, van gestionar un problema d'aigua calenta ràpidament. Punts negatius: llits separats i bany una mica antic. Però sens dubte, repetiré l'estada sense pensar-m'ho!

Maravillosa ubicación, maravillosa atención con un servicio de desayuno excepcional donde una empleada nos ofreció leche sin lactosa tras preguntarle y se acordó de nosotros al día siguiente, lo que hizo nuestra estancia aún más agradable.

Para mí nada.

La vista desde la habitación es espectacular, se ve la catedral a pocos pasos. El desayuno es bueno y variado, ideal para comenzar el día y el trato del personal es muy atento.

Los colchones son demasiado duros, un poco de comodidad no vendría mal.

Desayuno extraordinario con vistas a la catedral

El desayuno en este hotel es verdaderamente extraordinario, con una amplia oferta de opciones dulces y saladas. Además, la ubicación en la misma plaza a 50m de la catedral, con vistas directas, es inigualable. Sin embargo, la falta de información sobre la distribución de las habitaciones en edificios separados por distancia puede resultar incómoda para algunos huéspedes.

Recientemente estuve alojado en un hotel justo en frente de la catedral en el centro del casco antiguo de Burgo y quería compartir mi experiencia.

Solo tengo un par de sugerencias para mejorar la experiencia. En algunas habitaciones, los colchones podrían ser más cómodos para garantizar un descanso óptimo.