La ubicación del hotel es perfecta, al ladito de La Alhambra. El personal es encantador, las habitaciones grandes y cómodas y el desayuno espectacular. Añadio al encanto del lugar una violinista joven durante la cena. Lamentablemente, hubo un pequeño desorden en la factura al momento del check-out, pero no afectó la experiencia general. 🌟

Un viaje rápido y fácil al aeropuerto, solo 5 minutos a pie del hotel. La atención del equipo de organización de eventos fue excelente, ¡hicieron que mi reunión fuera súper fácil! Las habitaciones son amplias y luminosas, con todas las comodidades que necesitas. Me reí al descubrir que la habitación podía alojar a 70 invitados, ¡me pregunto si podrían organizar una fiesta en mi habitación! Alrededor puedes encontrar historia y cultura por todas partes, ¡perfecto para un amante del diseño como yo! - Carmen, de Barcelona, España.

El edificio es precioso y renovado, la cama muy cómoda. Disfrutamos del desayuno rico y la tranquila piscina, ideal con bebé. El jardin Sirve para relajarse y cerca hay muchos lugares históricos, como el Jardin de los Frailes o la Iglesia de San Bernabé. Aunque la habitación infantil no tenga piscina, la ubicación y atención valen la pena para una corta escapada en familia.

Siempre regreso a un hotel donde el personal me ayudó amablemente con mis padres ancianos. Tiene todo lo que necesito: Wi-Fi, restaurante y una piscina. Volveré para navidad.

Increíble ubicación y personal amable y servicial. Todo estuvo impecable y el desayuno fue excelente. La habitación tranquila y limpia. Recomiendo pasear por los alrededores. Volveré sin duda. Gracias Exe Victoria Palace por una estancia inolvidable. ¡Altamente recomendado!

Mi estancia en el hotel fue maravillosa. El edificio histórico en el que se encuentra el hotel es precioso y las habitaciones, que están renovadas, son modernas y sencillas. Me encantaron las vistas desde mi habitación, eran increíbles. La cama era cómoda y el personal siempre fue muy atento. El hotel está muy bien ubicado, ideal para visitar el Monasterio y disfrutar de la naturaleza de los alrededores. Sin duda, volveré en cuanto pueda.

Nada que no me haya gustado. 😊

excelente ubicación frente al Monasterio, personal amable y atento, habitaciones amplias y modernas con todas las comodidades. Destaco las vistas desde el balcón y la relación calidad-precio. Sin duda repetiría.

Pocas hamacas en la piscina.

La habitación de la suite es amplia y de estilo abuhardillado, perfecta para descansar. El baño tiene dos lavabos y bañera de hidromasaje. El hotel ofrece galán para colgar el traje, ideal para eventos. El desayuno es variado y delicioso, con opciones dulces, saladas y fruta. La ubicación es perfecta, al lado del monasterio, y cuenta con parking gratis cercano.

Me sentí especial, no me puedo quejar.

Preciosa ubicación junto al monasterio y en el centro histórico. Habitaciones reformadas y espaciosas. Bufet de desayuno espectacular. Vistas preciosas. Baño renovado.

La habitación era enorme y muy cómoda, con una cama amplia y una bonita decoración. Además, las vistas desde la habitación eran hermosas y disfrutamos de una vista increíble. También, me gustó mucho la ubicación del hotel, en el centro de la ciudad, tan cerca de todo.

Hubo algunas cosas que no me gustaron. En primer lugar, la recepción estaba un poco desordenada y no fue muy acogedora.

Ubicación inmejorable, habitación preciosa y confortable, buena atención y desayuno, personal amable.

No hay nada malo que decir.

Platillos divinos y hallazgos culinarios! ¡Las tapas en La Taberna del Viajero son una locura! También, la hospitalidad del personal y las vistas desde las habitaciones son espectaculares.

Durante la semana, la cafetería y el comedor cierran, pero ¡como las estrellas, este lugar brilla aún en sus cortinas ajadas! A pesar de pequeñas manchas, el encanto clásico perdura.

Este hotel ofrece una excelente relación calidad-precio. Me sorprendió gratamente el desayuno, con una amplia variedad y alta calidad de alimentos. Además, el personal fue muy atento y servicial, proporcionando un servicio de calidad.

No hubo ningún aspecto que me pareciera negativo, ya que todo estuvo en orden.

La habitación era amplia, con una cama grande y una terraza con vistas espectaculares. El desayuno era muy agradable, especialmente gracias a un violinista en directo. El personal también era amable y la ubicación del hotel era conveniente.

El hotel se encuentra en una excelente ubicación en el centro de la ciudad, a pocos minutos a pie de la estación de autobuses y al lado de la estación de trenes. Las habitaciones son espaciosas y están muy limpias, con baños modernos equipados con columnas de hidromasaje. Además, el personal de recepción es amable y ofrece buenos consejos sobre lugares para cenar en la zona.

El hotel carece de plazas de aparcamiento, lo que puede ser un inconveniente para aquellos que llegan en coche.