¡Perfecta ubicación! Cerca de atracciones turísticas. Instalaciones pequeñas pero limpias y cómodas. Personal amable. Comida deliciosa, destacando desayunos. Si vuelvo, me alojaría aquí de nuevo.

¡El alojamiento perfecto! La habitación super cómoda y amplia, ¡dormimos como nunca! Destaco el maravilloso desayuno y el excelente trato del servicio del hotel. Sin duda, repetiremos.

Recomendaría a todos este lugar.

Me encantó mi experiencia en este hotel durante mi Año Nuevo en Zaragoza. En cuanto a las cosas positivas, me gustó mucho la ubicación privilegiada del hotel. Estaba en pleno centro de la ciudad, lo cual fue muy conveniente para explorar todos los lugares turísticos. Además, me sorprendió gratamente el tamaño de la habitación, era amplia y acogedora. También debo mencionar que el baño era bastante grande y tenía una ducha espaciosa.

Mi estancia en este hotel fue realmente magnífica. Desde el momento en que llegué, el personal se mostró increíblemente amable y servicial. Me asignaron una habitación espaciosa y limpia, con una cama muy cómoda. La ubicación del hotel es perfecta, en el corazón de la ciudad y cerca de todos los lugares de interés. Además, el desayuno ofrecido por el hotel fue delicioso y el personal de la cafetería era encantador.

Somos una familia de 4 personas y estuvimos solo una noche en el hotel Sauce. Nuestra experiencia fue fantástica. La habitación familiar era amplia y acogedora, con camas cómodas y un baño impecable. La ubicación del hotel es inmejorable, a dos minutos de la Plaza de la Basílica. El personal fue extremadamente profesional, atento y agradable. El desayuno fue perfecto y nos llevaron un botecito de mermelada como recuerdo. Definitivamente, si volvemos, repetiremos.

Recomiendo este hotel, es total.

Me encantó la decoración del hotel, muy sencilla y acogedora. Las habitaciones eran preciosas, especialmente con esos techos abuhardillados tan originales. Además, el personal del hotel fue extremadamente amable y profesional, ayudándonos en todo lo que necesitábamos. Recomiendo este hotel al 100% para una escapada romántica.

Me gustaría mencionar dos aspectos negativos. En primer lugar, el baño era un poco incómodo para mi pareja, que mide más de 1,82 metros, ya que se daba más de un cabezazo al intentar ducharse.

Habitación amplia con cocina por el precio de una doble. Personal muy amable y servicial. Desayuno excelente con zumo natural y café delicioso. Buena ubicación en el casco antiguo. Recomendado para familias. 👍

Me encantó la estancia en este hotel durante Navidad. Los mejores aspectos fueron la deliciosa variedad de tartas, mermeladas y cafés artesanos que ofrecían en la cafetería. Además de eso, el personal fue excepcionalmente amable y atento. La ubicación también fue clave, ya que estaba muy cerca de los lugares turísticos más importantes. Y por si fuera poco, las ventanas del hotel eran muy aislantes tanto del frío como del ruido, y la climatización funcionaba de maravilla. Definitivamente fue una experiencia positiva.

Muy buena ubicación, cerca de la Plaza del Pilar y de tiendas. Habitación cómoda y limpia. Excelente servicio y atención personalizada. Desayuno con gran variedad y mermeladas caseras deliciosas. Aparcamiento disponible, aunque con costo adicional.

El parking es caro y no está incluido en el precio de la habitación. Algunas habitaciones pueden presentar problemas de ruido y la cama puede ser pequeña.

Mi estancia en este hotel fue fantástica. Todo fue perfecto, desde la ubicación en el corazón de la acción hasta la amabilidad del personal. Además, las instalaciones del hotel estaban impecables y la habitación era de un tamaño adecuado, con una cama muy cómoda. También debo destacar el delicioso desayuno buffet, con opciones como tortilla, quiche y zumo recién exprimido. Sin duda, este hotel tiene una ubicación excelente, cerca de la catedral y de todas las atracciones principales de esta ciudad.

No puedo quejarme de la propiedad de ninguna manera.

El hotel estaba en una zona animada, justo en el centro de la ciudad. La habitación era amplia y limpia, con un baño completamente renovado. Además, el desayuno buffet era excepcional, con un buen servicio.

A pesar de estar en pleno centro, había una falta de trabajadores y la comunicación con el hotel era difícil.

Me encantó mi escapada romántica en este hotel de Zaragoza. Lo que más me gustó fue la habitación, que tenía dos estancias separadas, perfecto para mi pareja y yo. Además, las camas eran súper cómodas y nuevas, y las almohadas eran tan mullidas que dormimos como bebés. Otro aspecto que me encantó es que el desayuno era espectacular, con mermeladas caseras y yogur natural sin azúcar, algo difícil de encontrar. La ubicación del hotel era perfecta, en el centro y cerca de todos los puntos turísticos.

En cuanto a lo negativo, lo peor fue el parking. Fue un desafío aparcar el coche en el garaje del hotel, era un poco complicado de maniobrar.